Por: Jeanette Hinostroza
Golazo el que le metió la Fiscalía al Gobierno, que en el
2008 asumió en Estados Unidos la defensa de Nelson Serrano, el ecuatoriano que
está condenado a cuatro penas de muerte, por crímenes que asegura no
cometió. Resulta que la Fiscalía
sobreseyó definitivamente al ex intendente de Pichincha Victor Hugo Olmedo y a
un grupo de policías, quienes habrían participado en la deportación ilegal del
ecuatoriano para que enfrente un juicio en la Florida, pues consideró que no
hubo tortura en este proceso. ¿No hubo
tortura? El hombre declaró que fue secuestrado en la calle, por policías
disfrazados de civiles ; y que luego fue golpeado, incomunicado y puesto en una
jaula de perros mientras resolvían cómo subirlo a un avión para ponerlo en
manos de un Investigador y un Fiscal de la Florida que vinieron a solicitar su
extradición, pero como el Ecuador no extradita personas a países en donde estén
expuestos a la pena de muerte, habrían resuelto ayudar a organizar su secuestro
y posterior deportación ilegal.
El argumento de la Fiscalía es que no pudieron hacerle un
examen a Nelson Serrano que compruebe palabras más, palabras menos, los traumas
que le habría dejado toda esta experiencia.
¿Examen? ¿No tenían un argumento más rebuscado? Por todo lo que sucedió el ecuatoriano
está 13 años en la cárcel, gritando que
es inocente, alejado de su familia, sin atención médica y a veces sin comida
resultado de castigos injustificados.
¿Cómo se llama eso? ¿En qué momento la Fiscalía consideró que había que
procesar al ex intendente y a este grupo de policías por tortura, cuando el
proceso se abrió por deportación ilegal?
La deportación ilegal y
violación de todos sus derechos fue reconocida por la CIDH y también por
el Gobierno Central, a través de sus Ex
Ministros Gustavo Jalk y Fernando Bustamante que, en 2008,
condenaron el hecho y anunciaron que en compensación dispondrían de los
recursos necesarios para defender a Serrano, en los procesos de apelación a la
pena de muerte. La defensa ha sido muy exitosa y ya se han encontrado pruebas
concretas que podrían demostrar que el ecuatoriano es inocente.
La aberración empezó aquí, pero quienes participaron en este
proceso ahora son presentados por la Fiscalía como santas palomas incapaces de
dañar a nadie. ¿Cuál es el siguiente
paso? ¿Decir que no hubo deportación ilegal? ¿Y como dice el ex intendente,
Serrano es gringo y por eso lo botaron del país? ¿Si ven donde está el
golazo? Todo esto podría terminar en que
el Gobierno ecuatoriano usó recursos del Estado para defender a un extranjero
acusado de criminal, cosa que no lo permite la ley y que expone a los
funcionarios del Ministerio de Justicia, que pagan a los abogados en Miami, a
ser acusados de peculado. Este es un
duro golpe a lo que el Ecuador intenta hacer por el compatriota, nada más y
nada menos que demostrarle al aparato de justicia Americano, que podría estar equivocado y que estaría a
punto de matar a un ecuatoriano que podría demostrar su inocencia.
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