Pichincha
El 31 de enero de 2014, la Superintendencia de la Información
y Comunicación (SUPERCOM) resolvió imponer una multa a diario El Universo,
equivalente al 2% de su facturación promediada de los últimos tres meses, así
como exigió que dentro de 72 horas se rectifique el texto que consta en la
caricatura titulada “Regale la navidad” de autoría de Xavier Bonilla “Bonil”,
publicada el pasado 28 de diciembre de 2013. En ella, el humorista gráfico de
diario El Universo retrató el allanamiento y confiscación de las computadoras
del periodista y activista Fernando Villavicencio.
La Supercom resolvió que la rectificación deberá hacerse “con
las mismas características, dimensiones, en el mismo espacio y sección (…) por
cuanto la afirmación que hace en su contenido no corresponde a la realidad de
los hechos y estigmatiza la acción tanto de la Fiscalía General del Estado y
como de la Policía Judicial".
Para el Dr. Ramiro García, defensor del caricaturista, se ha
dado un “juzgamiento inconstitucional”, pues “la misma entidad que acusa es la
que resuelve, es decir, es juez y parte y se rompe el principio de la
imparcialidad”. Por ello aseguró que apelará esta decisión ante la justicia
constitucional a través de las acciones de protección respectivas.
En la audiencia de sustentación de pruebas, que se desarrolló
el pasado martes 28 de enero y que duró cerca de dos horas, las partes
presentaron sus argumentos y pruebas de cargo y descargo, dentro del proceso
que incluye la Ley Orgánica de Comunicación y un reglamento de sanciones. Este
se abrió el 10 de enero pasado contra el caricaturista y en cuyo informe se
aseguró que la caricatura en cuestión, “apoya a la agitación social” y
“deslegitima la acción de la autoridad”.
El representante de la Supercom, Bolívar Torres, leyó durante
la audiencia el reporte interno emitido por el personal técnico y jurídico de
esa entidad de control e insistió en que “la caricatura es un producto
comunicacional que refleja la opinión, por tanto regulado por la Ley y no está exento
de responsabilidad”. También citó artículos de la Ley de Comunicación que,
según Torres, no excluyen a los caricaturistas de recibir sanciones.
En un escrito que presentó la defensa del humorista gráfico
se afirmó que “una caricatura es una forma de opinión humorística gráfica, por
tanto sujeta a la perspectiva tanto de quien la realiza, como de quien la
observa (…)”.Sobre el caso en específico, el caricaturista detalló que todos y
cada uno de los cuadros que componen el conjunto de la caricatura, responden a
la información que se encontraba a su alcance el 27 de diciembre de 2013, sobre
el allanamiento a la vivienda de Villavicencio.
La caricatura que desató este proceso fue publicada junto a
una leyenda que decía lo siguiente: “Policía y Fiscalía allanan domicilio de
Fernando Villavicencio y se llevan documentación de denuncias de corrupción”.
Por ese texto, el presidente Rafael Correa, durante el enlace ciudadano No. 355
del 4 de enero, amenazó al caricaturista
con aplicar la Ley de Comunicación, a la vez que lo tildó de "sicario de
tinta y enfermo”. Tras esto, el pasado lunes 6 de enero, el Superintendente de
la Información y Comunicación solicitó a diario El Universo copias de la
caricatura y “la identidad del autor” de la misma, información a ser entregada
en 72 horas, lo que constituyó el primer paso para el inicio del proceso.
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