“La preocupación (del
Gobierno) es con la verdad”, dice la exasambleísta Martha Roldós, y expresa ser
víctima de “linchamiento mediático”, figura creada mediante la Ley de
Comunicación aprobada en junio pasado por la Asamblea.
Usted ha anunciado acciones legales contra medios públicos
(El Telégrafo, Andes, TC Televisión) y un periodista por supuesto linchamiento
mediático y hackeo a sus cuentas de correo, ¿cree que tendrá éxito en los
procesos?
Mis abogados están haciendo todo. Hay que ver cómo reacciona
el señor (Carlos) Ochoa (superintendente de Información y Comunicación). Él
debió actuar de oficio. Nos parecía curiosa esa figura del linchamiento
mediático, pero resulta que no es que lo estaban censurando, lo estaban
patentando. Seguro en el IEPI (Instituto Ecuatoriano de Propiedad Intelectual)
está registrado el linchamiento mediático como algo que exclusivamente puede
hacer el presidente (Rafael) Correa.
¿Cuál es el objetivo central?
Las acciones legales van en torno a eso: quisieron hacer
noticia de un proyecto en el que no hay ninguna acción delictiva; es entre
personas particulares que tenemos todo el derecho de tener proyectos y de
buscar financiamiento. Pero publicaron en diario El Telégrafo íntegro el correo
del señor Adam Isacson al señor David Holliday. Está traducido palabra por
palabra. Un correo privado que solo estaba en las cuentas de ellos y la mía que
me lo copian. Ninguno de ellos entregó el correo, tampoco yo.
Desde el Gobierno se asegura que la NED tiene cierta relación
con la CIA, ¿ha considerado la posibilidad de que eso sea cierto?
El Gobierno tendrá que demostrar eso. Además, hace una serie
de conexiones absurdas. Es una manera de crear conectores falsos. La NED ha
financiado muchos proyectos sin que al Gobierno la haya molestado, incluso a
gente de este Gobierno. Han querido voltear la discusión, porque la NED no
debería ser parte del debate. El debate que tiene que haber es que tienen que
explicar cómo fueron a parar esos correos míos a El Telégrafo, cómo es que el
Gobierno tiene información de ciudadanos; cómo es que voltean las cosas y, como
diría (Julian) Assange (fundador de WikiLeaks), pretenden que nosotros rindamos
cuentas, cuando es el Gobierno el que debe rendir cuentas. Lo que me alivia un
poco de esto es que Correa no tiene el Ecuador que quiere, que las muestras de
solidaridad han sido grandes. Ecuador aún está resistiendo al modelo
totalitario de Correa...
¿Por qué la NED?
Está claro que hemos conversado también con Wola (Washington
Office on Latin America), también estábamos conversando con Open Society
Foundation. A la NED (National Endowment for Democracy) le estábamos pidiendo
una parte. Hemos presentado este proyecto a otra gente. No es parte de esto el
señor Holliday, como no es Gonzalo Guillén, como no lo es la señora de Costa
Rica (Giannina Segnini).
Su hermano Santiago dice que se hace esta relación entre su
proyecto, la NED y la CIA para insinuar que usted estaría con los que
presuntamente mataron a su padre, el presidente Jaime Roldós, ¿por qué el
régimen querría hacer eso?
Porque quiere callarme. Para nadie es desconocido que he sido
crítica de este régimen. Alguien me decía por qué todavía no te persigue
Correa, por qué sigues hablando con algún nivel de libertad; y yo pensaba y
decía que para Correa era difícil con el cariño que tiene la gente a la imagen
de mis padres. Obviamente la imagen de mis padres me cobijaba y me daba cierta
protección. Han tenido que pensar mucho y han hecho lo más bajo. Han tenido la
acción más miserable que es querer presentarme ante el pueblo como alguien que
traiciona la memoria de sus padres. Es doloroso lo que han hecho para querer
deshumanizarme. Esa es una táctica fascista.
El Telégrafo también dice textualmente que la iniciativa de
su agencia “no tiene ningún propósito mediático o periodístico, sino sostener a
la oposición política”, ¿cuál es el fin de Tamia News y la fundación Mil Hojas?
Está en los documentos que hackearon. Queremos tener un
archivo documental, seguro, para que no desaparezca, como han desaparecido
tantas cosas hasta ahora; además, queríamos mantener investigación
especializada. Para la mayor parte de los medios que funcionan en el país,
ahora es imposible investigar. Por eso queríamos obtener la personería jurídica
en Panamá, que no es ilegal. Lo importante es tener la libertad para
investigar.
‘‘Me parecería
milagroso lograr algo, pero queremos ver cómo funciona el señor (Carlos) Ochoa
cuando alguien es perseguido desde el poder...”.
‘‘Decir que soy
cabeza de la CIA en el Ecuador es una cosa absurda y, más que eso todavía, es
una afirmación miserable... Es doloroso lo que han hecho para querer
deshumanizarme”.
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