Domingo, 23 de noviembre, 2014
Nueve veces se buscó ‘legitimar
gestión’ en urnas
Nueve consultas populares o
referendos de carácter nacional se han celebrado en el país desde su retorno a
la democracia.
La mayoría, según expertos,
obedecieron a intereses del gobierno de turno para legitimar ciertas
decisiones.
El actual ha descartado ir a las
urnas para averiguar si la gente respalda los cambios a la Constitución y tras
el dictamen de la Corte Constitucional el proyecto se tramita vía enmienda en
la Asamblea Nacional, donde el oficialismo tiene mayoría.
El historiador Juan Paz y Miño cuenta
que la primera experiencia fue la de 1978, que avaló una nueva Constitución.
Hasta entonces, “los políticos consideraban una barbaridad someter al pueblo a
aspectos que competían a juristas”. Antes solo hubo un referéndum ratificatorio
de la Carta impulsada por Gabriel García Moreno, 1869.
Y opina que salvo la de 1978, “todas
las demás consultas han sido a conveniencia política de los gobiernos”.
La analista Patricia de la Torre agrega
que la mayoría buscaba “legitimar decisiones” que no lograban concretar bajo
otros mecanismos, debido a “pugnas de poder”.
Dice que los procesos de 1994 y 1997,
promovidos por Sixto Durán-Ballén y Fabián Alarcón, en su orden, se dieron
durante “épocas de crisis” entre las funciones Ejecutiva y Legislativa.
De los nueve procesos, uno fue
rechazado en su totalidad: el de 1995, también empujado por Durán-Ballén. Esto,
según Paz y Miño, porque el régimen pretendía consolidar un “modelo neoliberal”
con la privatización de la seguridad social. De la Torre cree que el pueblo
rechazó al gobernante por el incumplimiento de varias ofertas.
Del total de convocatorias
nacionales, tres han sido en la gestión de Correa.
El analista Felipe Burbano opina que
él “le teme a una consulta sobre la reelección” porque no es un tema que
“despierte simpatías”, y sería el “escenario propicio” para que la oposición se
una en torno al ‘No’.
De hecho, el colectivo Compromiso
Ecuador y el partido Sociedad Patriótica formalizaron (por separado) pedidos de
consulta sobre ese tema.
La propuesta ya fue sometida a las
urnas en 1994 y recibió el apoyo del 35,94 %. No especificaba si era
indefinida.
Paz y Miño explica que la aprobación
implicó una reforma a la Constitución de 1978, pero que no fue ejercida por la
situación política de la época.
En 1996, Abdalá Bucaram ganó la
Presidencia, pero fue destituido en 1997. Entonces rigió un gobierno interino y
en 1998 se aprobó otra Carta Magna con la reelección presidencial pasando un
periodo. Y en la Constitución que Correa patrocinó y que fue promulgada en el
2008 se estableció por una sola vez. Él ahora afirma que “toda obra humana es
perfectible”.
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