Publicado en la revista El Observador, edición 103, febrero del 2018 |
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El Patrono del Primer Colegio de la Provincia del Cañar, creado hace 125 años, el 17 de Agosto de 1892, es Juan Bautista Vásquez Erdoysa. Nacido posiblemente el 24 de Junio de 1821, en el sector “Las Lajas” de la parroquia Chuquipata del cantón Azogues. Sus padres fueron don Joaquín Vásquez y doña Francisca Erdoysa. Fue bautizado el 2 de Julio de 1821, por el cura Javier Loyola, en la Iglesia Parroquial; siendo padrino del bautismo don Pedro Erdoysa y testigo don Baltasar Shindon.
Hay duda en el día de su nacimiento, a falta de prueba documental, sin embargo se presume que fue el 24 de Junio, porque en aquel tiempo era costumbre poner al recién nacido, el nombre coincidente al santoral católico; y el 24 de Junio es el Día de San Juan Bautista, que coincide con el nombre de Juan Bautista Vásquez Erdoysa. También se duda en la correcta escritura de su apellido paterno: Vásquez o Vázquez. En el acta de su bautismo consta que es hijo legítimo de don Joaquín Vásquez. Y en documentos de los Archivos de la Universidad de Cuenca, donde fue Rector, consta su firma como Vázquez. Igualmente el apellido materno se escribe Herdoiza, pero lo correcto es Erdoysa, de acuerdo a su acta matrimonial. No hay su Partida de Nacimiento, porque entre 1821 y 1899 que comprenden los años de su existencia, no había el Registro Civil; pues cuando nació Juan Bautista Vásquez Erdoysa, todavía no existía la República del Ecuador. En los años de su niñez, Juan Bautista Vásquez Erdoysa vivió en su campiña nativa. Es obvio que ayudó a su mamá en los quehaceres domésticos, es natural que cultivó la tierra como un agricultor más; lógicamente que comió choclos, porotos, papas, zambo, zapallo, máchica, arroz de cebada, locros con nabos de chacra; es normal que subió a los árboles frutales y especialmente a coger capulíes; asimismo es seguro que compartió en la crianza de las aves y los animales domésticos, en la casa de adobe y teja de sus progenitores. Su vida era común a los demás niños de la comarca; una vida simple, modesta, sencilla, disfrutando las bondades de la Madre Tierra, dentro de la tranquilidad y grandeza de la vida rural. Las primeras enseñanzas de lectura y escritura recibió de su hacendosa madre Francisca Erdoysa y también de su tío materno Presbítero José Félix Erdoysa. Después de la muerte de su querido padre don Joaquín Vásquez, sale a vivir en Cuenca con su madre y sus hermanas. Realiza sus estudios primarios en una escuelita del Barrio de San Sebastián, destacándose como un niño estudioso, de notable inteligencia y dedicado a la lectura. Conviene recordar que al constituirse la República del Ecuador en 1830, Juan Bautista Vásquez Erdoysa tiene nueve años de edad. A sus quince años, en 1836, ingresa al “Seminario Consular de Cuenca”, Colegio de Enseñanza Secundaria y Superior; concluyendo sus estudios secundarios a los 19 años de edad, el 18 de Junio de 1840; diez años después de formada la República del Ecuador. En el mismo año 1840, el joven Juan Buatista inicia la carrera de Abogado, estudiando Derecho Público, Constitucional y Canónico, Legislación y Economía Política, hasta Marzo de 1844, obteniendo el título de Abogado, a sus 23 años de edad. Cuatro años después, a sus 27 años, se gradúa de Doctor, el 16 de Octubre de 1848, rindiendo el examen de conocimientos ante la Corte Suprema de Justicia, en Quito. Su gran formación intelectual, colmada de principios y valores humanos, le convierte en una persona de extraordinaria valía. Por ende, es un visionario en las soluciones de los problemas de la Patria. Considera que la educación es una necesidad básica del Pueblo. Para él, la cultura es un elemento primordial en el presente y el devenir de la Patria. Por eso funda la Primera Biblioteca Pública de Cuenca, el 24 de Mayo de 1882, con sus propios libros. Para eliminar la ignorancia y el analfabetismo funda “27 escuelas primarias” y es el “iniciador de la escuela laica de Cuenca”, según Carlos Aguilar Vázquez. Además el Doctor Juan Bautista Vásquez Erdoysa es un verdadero abogado, un jurista, amante de la justicia como principio de la equidad social; pues dice: “Ser abogado constituye una garantía para la sociedad, no su corruptor; protector de la justicia, controlador de gobernantes, pulverizador de fraudes, encausador del Derecho, saneador de honras en litigio, vigilador de dignidades. Esto es ser abogado correcto y de conciencia”. Este es un decálogo para todos los abogados, en los albores de la Abogacía en el Ecuador. Es un perenne decálogo profesional de los abogados en contra de la corrupción. El abogado que no practica este decálogo será cualquier individuo, menos abogado. En consecuencia Juan Bautista Vásquez Erdoysa es un abogado ejemplar, un abogado lumbrera para los demás colegas |
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