El observador

Michael Phelps en una de sus competencias del jueves Chang W. Lee/The New York Times Los Juegos Olímpicos de Río 2016 serán recordados por dos nombres: Michael Phelpsy Simone Biles. El nadador de Baltimore llegó a sus quintas olimpiadas a demostrarle a fieles y escépticos que es una fuerza de la naturaleza. A sus 31 años, próximo a casarse y padre de un pequeño, Phelps alcanzó la gloria al romper el récord de Leónidas de Rodas, el atleta que más preseas doradas individuales había obtenido. Leónidas logró su récord de 12 medallas de oro en 152 a. C. Tras las competiciones de anoche, Phelps se convirtió en el deportista olímpico más laureado de todos los tiempos: ha ganado 13 medallas de oro individuales, de las 26 que tiene en total. Biles, por su lado, tiene 19 años y apenas comienza su carrera olímpica. Tras ganar el oro con el equipo de Estados Unidos esta semana, ayer voló, brincó y bailó con gracia y perfección, lo que le aseguró el primer puesto en la competencia individual general y el título de nueva reina de la gimnasia artística. “No soy el próximo Usain Bolt, o el próximo Michael Phelps”, dijo después de ganar una de sus medallas de oro, “soy la primera Simone Biles”.