Mantenerse por más de una década en las publicaciones diarias (de lunes a sábado) en “El Comercio†es un verdadero éxito, digno de Felicitación; a más de ser la única tira cómica nacional y que tanto aporta en la cultura capitalina y nacional; cuyo autor orgullosamente cuencano es Fabián Patiño Sánchez -f.s.patinho. Aún recuerdo a un niño de cuatro años con su pequeña melena y saco cuadriculado, dibujando y pintando con su mano izquierda en el Parque de San Sebastián, en un concurso novembrino organizado por la Municipalidad de Cuenca y ¡Claro que ganó en su categoría! Desde entonces quien miraba y admiraba su obra podía vaticinar su talento y su futuro artístico. Nacido justamente en este barrio, un 24 de enero de hace más de 40 años; estudió la primaria en la Hernán Cordero y la secundaria en el Técnico Salesiano, en la especialidad de electricidad; su tesis de grado fue una guitarra eléctrica para zurdos. Sin embargo no siguió en la Universidad una carrera afín a su especialidad, sino que optó por el arte gráfico, viajando a Quito para cumplir su sueño e involucrarse absolutamente con el arte: música, teatro, las letras y el cómic que es su pasión. Historiador de la imagen y autor visual ha escrito para teatro y dirigido cinco cortometrajes de ficción, pin-ups y dos documentales. En poesía publicó: Calla ahora o habla para siempre (1997) Una novela: Hipocampos en la ciénega (2009). Con una amplia trayectoria en la plástica ha expuesto en diferentes países. En el 2010 estrena su primer largometraje documental Blomberg regresa. Presentó su obra compilatoria de los 5 años de Ana y Milena; y ahora, la de los 10 años. Toca la guitarra y compone en el grupo Sor Juana y las trampas de la fe. Cuando viene a Cuenca, visita a su familia, porque es el “bárbaro†de su padre, y lo fue de su madre; el último de tres hermanos y cinco hermanas, quizá por eso asumió las vivencias femeninas y las plasmó en su tira cómica “Ana y Milena†que presentó recientemente en el Centro Cultural “República Sur†junto a su obra de teatro “Elías o quién diablos te crees que eres…†escrita y dirigida por él y con la actuación de Gonzalo Estupiñán, por tres noches seguidas en el mismo Centro, donde tuvimos el gusto de admirarle y aplaudirle. Me robaré parte de la presentación brillante que hicieron dos reconocidas profesionales y artistas de nuestro medio: Vilma Vargas- arquitecta y caricaturista riobambeña, radicada en Cuenca, inició su presentación de una forma muy singular: “Patinho me ha puesto en la difícil tarea de presentar su libro y recalco en lo difícil, porque en alguna ocasión Fabián dijo que “no es caricaturista†y como tampoco yo soy presentadora, entonces somos los candidatos perfectos para ocupar algún cargo público… Patinho jamás recurre al chiste fácil, sus reflexiones son inquietantes, profundas, perturbadoras y de un alto nivel crítico con la sociedad y su tiempo. Sus diálogos incisivos nos brindan la posibilidad de pensar acerca de temas cotidianos, de pareja o de política; más de una vez la tira cómica sintetizó con una “misericordiosa brevedad†lo que a nosotros nos hubiese gustado decir y no sabíamos cómo hacerlo… Aquellas conversaciones y muchas veces aforismos salen de la boca de mujeres, mujeres desenfadadas, tan bien dibujadas, parcas, guapas, directas y sin tapujos que dicen cosas tan fuertes y filosóficas sin jamás desdibujarse. Ellas viven diariamente en las páginas de un periódico, pero sobre todo viven en un país con mujeres que se autocalifican como sumisas, viven con un 60 e mujeres que han sufrido algún tipo de violencia…†María José Machado- abogada, pintora y activista por los derechos, jefa del Departamento de Planificación y Gestión por la Equidad Social y de Género del GAD Municipal, analizó con profundidad la obra expresando entre otras cosas lo siguiente: “ Ana y Milena… una década de mostrar con ingenio y sin tapujos, como en un espejo, a la sociedad capitalista y urbana de clase media-alta, blanco-mestiza, en sus vivencias y preocupaciones cotidianas: la coyuntura política, la denuncia social, las aspiraciones económicas y laborales, las angustias de la burocracia, el diálogo entre generaciones, entre hombres y mujeres; la imperturbabilidad, el desenfado, la complejidad de las relaciones humanas y el amor… El libro conmemorativo de Ana y Milena nos regala una colección privilegiada de esas finas ironías de coyuntura, dosificadas con escenas cotidianas, construidas como caligramas, con monólogos, prosopopeyas, pensamientos y sobre todo, conversaciones. Ana y Milena es un entretenido diálogo que ha ido ganando un compromiso social, político y feminista. Esto sin perder la estética pop de revista de moda, con dibujos bien logrados por la mano ágil y creativa que lo es por una mezcla muy complicada de lograr: la del genio y la del oficio, donde se suma la generosa imaginación y la disciplina; la cualidad de ser prolífico sin copiarse a sí mismo…†Se complementó la presentación y el análisis de la obra Ana y Milena con un Video-Recreación muy bien logrado con actores y personajes de la vida real. Pues Ana, de 27 años y Milena de 25, son dos jóvenes ecuatorianas, diseñadoras gráficas, tienen un estudio llamado: “Asuntos gráficos†trabajan en diseño gráfico editorial y publicidad. En su vida personal son muy independientes, lucen atractivas, frecuentan los cafetines de moda, el buen cine. Ana es la más seria, con una personalidad mordaz y con los pies en la tierra asume la gerencia, además es madre soltera del pequeño Ariel. Milena es más cándida, pero sorprende con su inesperado e ingenioso encanto, junto a su perro Patiño. El Mat, la Sisa, el Curco, Don Rodolfo, Antonia, Carla y Alberto completan el marco de honor de estas historias. Auguro muchos años más de éxito a mi hermano Fabián y a esta obra que nos invita a leerla y disfrutarla. |
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