El observador

Conversando con los frentistas de la calle Sangurima, entre Mariano Cuenca y Huayna Cápac, sobre los problemas que enfrentan diariamente desde que abrieron las calles para construir las obras del tranvía. Señor estamos abandonados, las obras están paralizadas como puede constatar, las aguas estancadas producen olores insoportables, reina la insalubridad, todo es un caos, y las autoridades, muy bien gracias, disfrutando de las delicias del poder, y de las falsas promesas. Hásta cuándo, señor Alcalde. Hasta la próxima campaña queridos conciudadanos. Recuerden que cumplo las promesas, al pie de la letra, sino pregunten a mis familiares. Escuche la radio que canta y encanta en www.radioelobservador.com