José Serrano no se salvó del paredón
José Serrano tendrá, finalmente, que rendir cuentas en la Asamblea Nacional y exponerse a ser destituido este viernes 9 de marzo: 112 asambleístas, entre los que se incluyeron los de Alianza País, que estuvieron en la mañana a Carondelet, votaron hoy, 7 de marzo, la moción de César Rohon, que él cambió el martes 6. En un comienzo el asambleísta socialcristiano pidió que Serrano y Carlos Baca Mancheno comparecieran ante el pleno de la Asamblea. Esto originó un enfrentamiento político con CREO y otras fuerzas políticas, que mocionaron para que Serrano renunciara y se fuera.
Ayer, en la sesión presidida por Carlos Bergmann, Rohon, haciéndose eco de las críticas que recibió el socialcristianismo por su posición, agregó dos puntos a su moción: que se decida en la misma sesión la destitución de Serrano y el llamado a juicio político al Fiscal General de la Nación.
La suerte del Presidente de la Asamblea parece estar sellada. El lunes, en su mensaje, el Presidente de la República le retiró su apoyo político. Lenín Moreno pidió, en efecto, a los involucrados en escándalos de los últimas semanas, que den un paso al costado. La señal fue directa e inequívoca. Serrano no obstante afirmó que no pensaba dejar su cargo y ensayó una línea de defensa que reveló en un video producido en la Asamblea Nacional. Es una pieza maestra. En seis minutos, el Presidente de la Asamblea sintetiza las tesis y actitudes surgidas y administradas durante diez años que han dado paso a un perfil de político del cual él es un prototipo. El juego de Serrano puede ser analizado bajo estas características:
- Aparentar una calma chicha: para ello adoptó un tono sereno y un talante decidido. Serrano buscó así comunicar que no estaba inquieto de dar explicaciones a la Asamblea Nacional. El fondo del mensaje era obviamente planificado: quien nada debe, nada teme.
- Desempolvar la institucionalidad:Serrano no habla en calidad de acusado. Asume que es un representante de las instituciones democráticas y, a la vez, garante de la institucionalidad. No establece relación alguna entre las obligaciones que impone ser Presidente de la Asamblea Nacional –cargo que ocupa desde el 14 de mayo del año pasado– y la conversación que tiene con su compadre lindo que más parece diálogo entre jefes de clanes.
- Enfundar el traje de víctima: por supuesto que reconoce que ha mantenido conversaciones con Pólit, que evita citar. Por supuesto que informará palabra por palabra lo que dice en ese audio. No solo eso. Dirá más. Lo hará en forma transparente para que la opinión distinga entre lo que él hizo y lo que hacen otros: los descalificadores, las personas capaces de mentir, de forjar documentos y manipularlos; aquellos que se extralimitan en sus funciones. Así Serrano hábilmente busca pasar de acusado a víctima.
- Volverse un baluarte de la estabilidad:este movimiento táctico está dirigido directamente a Moreno. Como lo supone débil políticamente, Serrano se vuelve su principal guardián. Lo hace jugando billar a tres bandas: no permitirá, dice, que por un trueque entre correístas y la bancada de Lasso se genere ingobernabilidad para el ganador indiscutible de la elección presidencial. En una frase, resucita el fantasma del fraude y une a los fieles de Correa y Lasso conchabados contra Moreno. ¿Pruebas de lo que afirma? Ninguna. Pero echa a correr el rumor como si fuera un hecho. Y de acusado se convierte en defensor de Moreno y de la estabilidad de su gobierno, enfrentados a un peligro que él fabrica para guarecerse tras él. No importa su cargo. Serrano es hombre de grandilocuencias útiles: se quieren tomar la Asamblea los perdedores, solo interesa defender la institucionalidad del país y la soberanía de los ciudadanos. Así pasa de jefe de clan a estadista admirable.
- Inventarse un relato fantástico: no se puede negar que Serrano es un político de una creatividad temeraria. ¿Qué hacía con un prófugo de la Justicia? Pues investigarlo. Y no solo ha investigado a Pólit. Se ha reunido con otros funcionarios y ex funcionarios con ese fin: cotejar pruebas, corroborar documentos que los involucran en procederes ilegales e irregulares. No solo lo ha hecho: lo seguirá haciendo “con quien será necesario para defender los intereses del país”. Así, de acusado pasa a ser agente encubierto disfrazado de Presidente de la Asamblea Nacional.
- Hacerse santo de su devoción: para aquellos que no han entendido que el norte de José Serrano es el más alto interés de la patria, él les recuerda que no permitirá reparto de troncha alguna. Eso es lo que seguramente lo inspiró a decir en el video que tienen que bajarse al fiscal porque él ya no se sabe a quién responde. Ahora se entiende que no hablaba de un jefe de clan sino de los intereses supremos de la nación. Por eso se dice dispuesto a defenderlos del fuego cruzado que, según él, tiene por blanco la democracia. Así pasa de complotador a guardián del templo.
- Pedir perdón sin pedir perdón: cual caballero, Serrano pide perdón en el video… por su vehemencia. Porque si en algo ha fallado, no se debe a eventuales corruptelas ni acuerdos chuecos. Si en algo ha fallado, hay que buscar la razón en su pasión por el país, porque en su nombre está acostumbrado a jugarse el todo por el todo…
Este video es una obra maestra. Reúne todas las características de cinismo y osadía propias de políticos que se formaron en la escuela de Rafael Correa. Hay que verlo para recordar por qué una persona como José Serrano no debió nunca ocupar la Presidencia de la Asamblea Nacional.
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