MORENO SE RECONCILIA CON LA PRENSA TRAS DÉCADA CORREÍSTA
EFE domingo, 24 de febrero de 2019 - 11:03
El presidente de la República, Lenín Moreno, parece haberse reconciliado con el gremio periodístico con la escenificada firma el miércoles pasado de la Declaración de Chapultepec, pero no faltan quienes le recuerdan que su trabajo por la libertad de expresión y prensa no ha terminado.
El mandatario ratificó el decálogo de Chapultepec como muestra de su compromiso con la democracia y la libertad de expresión en el país, y tras conseguir aprobar en la Asamblea Nacional una larga serie de enmiendas a una polémica Ley Orgánica de Comunicación (LOC) aprobada en 2013 por su predecesor, Rafael Correa.
"Lastimosamente han tenido que pasar diez años para que el actual presidente, con mucha sensibilidad y visión, entienda que la libertad de prensa es un verdadero don para el ser humano", dijo a Efe Alfonso Espinosa de los Monteros.
Histórico presentador de noticias de Ecuavisa y premio Guinness como presentador con mayor tiempo de pantalla ininterrumpidamente, más de 50 años, Espinosa fue uno de los invitados de lujo de un evento en el que el mandatario se arropó de los editores y periodistas más destacados del país.
Y es que el hecho de que Moreno se haya sumado a esta iniciativa firmada hasta ahora por otros 65 jefes de Estado, entre ellos Jamil Mahuad (1998-2000), Lucio Gutiérrez (2003-2005), y Alfredo Palacio (2005-2007), se produce después de una década de persecución a periodistas y medios por el anterior Gobierno.
Correa, que veía en ciertos medios privados a una "prensa corrupta" que "ni siquiera debería existir", mantuvo distancia de la Sociedad Interamericana de Periodistas (SIP), cuya actual presidenta, la colombiana María Elvira Rodríguez, acompañó a Moreno en la ceremonia.
"La SIP no era de los afectos de Correa porque lo que hacemos es defender la libertad en el hemisferio. El expresidente estigmatizaba mucho nuestra labor y a su estilo, por eso nunca firmó la Declaración", declaró a Efe.
Rodríguez también recordó la LOC de Correa como "la peor ley que se ha visto en el continente", porque dio privilegios a las autoridades por encima de libertad de expresión, hasta convertirse en una "ley mordaza" por sus sanciones políticas, judiciales y económicas.
Desde que entró en vigencia para supuestamente combatir los "excesos de la prensa corrupta", hasta la llegada al poder de Moreno, la Superintendencia de Comunicaciones (Supercom) -en proceso de supresión- encausó 1.081 casos en contra de medios y periodistas, de los que 675 terminaron en sanciones, según datos de la Fundación Andina para la Observación y Estudio de Medios (Fundamedios).
"Prefiero mil veces los excesos de la prensa que el imperio de la mordaza y la censura", argumentó Moreno en el acto arrancando sonados aplausos a su invitados, ante los que no escatimó una severa crítica a su predecesor.
Una situación que Moreno prometió resolver y a la que la semana pasada puso fin con sus enmiendas a la LOC, entre ellas la que elimina definitivamente la otrora temible Supercom.
Y a pesar de que el gremio respira ahora un aire más democrático, no son pocos los que exigen llegar hasta el final con las reformas, porque hay aún elementos en la ley dados a la libre interpretación.
"Es un paso gigante (..) pero creo que aún hay cosas por revisar bien y evaluar, porque quedan artículos que un próximo Gobierno no democrático podría utilizar para cometer abusos", explicó Rodríguez.
Por su parte, Espinosa considera esas reformas un "paso muy significativo", pero advierte que hubiera preferido la completa anulación de la LOC y la creación de una legislación completamente nueva que contemple "la visión de los periodistas", y sin "la visión política con la que la creó el Gobierno anterior".
César Ricaurte, director ejecutivo de Fundamedios, calificó la firma de la Declaración de Chapultepec de "homenaje" a la libertad de expresión "por primera vez en doce años", pero exhortó también a erradicar la "cultura de secreto y censura que está presente en muchos sectores de la sociedad ecuatoriana".
Y apuntó que si bien las enmiendas "no son las reformas integrales que se necesitan", sí "marcan una hoja de ruta, como país, para recuperar plenamente la libertad de expresión".
No hay comentarios:
Publicar un comentario