Carta del General Miguel Oswaldo Moreno Valverde.

PRESIDENTE "SIMPÁTICO" CORREA.


De mis consideraciones.-


Creo que el gran demagogo es usted. Usted es un verdadero canalla porque a los 9 años de su gobierno recién se da cuenta de estas "arbitrariedades" - que según usted se hizo en el ISSFA y el ISSPOL - cuando todas estas disposiciones están perfectamente reguladas en la Constitución de la República y en las leyes pertinentes. O se olvida que sus Ministros inútiles que desarmaron a las Fuerzas Armadas son los que presiden o presidieron el Directorio de esta noble Institución que no pertenece al Estado sino a sus afiliados.
Que cobardía la suya Presidente, que ruines sus comentarios ante la opinión pública. Usted es otra persona no grata para nuestra querida institución. Le recuerdo que en los últimos gobiernos democráticos, nadie ...pero nadie nos ha ofendido tanto y nos ha desprestigiado tanto como usted.
Acaso tiene "patente de corso" Presidente, para hablar lo que se le dé "la regalada gana" frente a un auditorio de ciudadanos ingenuos e ignorantes de la realidad nacional quienes aplauden sin saber si quiera lo que usted "cotorrea" en cada sabatina.
¿Recuerda usted Presidente, que para hacerse el "simpático" con los militares, adelantó un año para que se ponga en vigencia la homologación salarial con el sector público?
¿Usted piensa que los militares somos bobos y que usted es el "iluminado"?
Que equivocado está usted "simpático" Presidente, cuando lo que busca es reelegir a su séquito de colaboradores que lo han quebrado al país y ahora burlando las leyes quiere reelegirse a punta de patadas a esa Constitución prostituída y violada por ustedes mismos.
Usted quiere que los militares o la sociedad civil le botemos del poder -ganas no nos falta- para victimizarse ante el foro internacional e ingresar fácilmente con asilo político al país de su preferencia y con eso dejar en la impunidad su nefasta administración pública. No Presidente, las generaciones que fuimos educados por dignos militares sabemos que el poder radica en el pueblo y que, en una democracia moderna, la regla de la mayoría, juega un rol decisivo y fundamental en la estabilidad de una sociedad civilizada. Por eso usted debe quedarse y terminar su periodo presidencial para el que fue elegido...¡con el dolor del alma!
Esa es la democracia y por eso desde esta tribuna jamás acepté apoyar un ¡FUERA CORREA FUERA!, cuando sabía que no era ético ni procedente ese mecanismo anticonstitucional. Ahora, si apoyo el nuevo slogan ¡RENUNCIA CORREA RENUNCIA!, porque es notorio que su comportamieto psicosomático no corresponde al de un estadista y porque usted no está a la altura de tan magna investidura.
Imposible de cree, ahora que se necesita concentrar toda la atención en nuestros hermanos damnificados, sólo a usted se le ocurre dedicar gran parte de su tiempo en ver la manera de "sacarse el clavo" con los Generales que se le insubordinaron y hace lo imposible para "cobrarles" sus injerencias políticas que según usted fueron arbitrarias e improcedentes. Claro, se sabe que castigar el bolsillo de los militares es en dónde más les duele y usted lo va a ejecutar: disminuir la cesantía y sus remuneraciones de retiro. Sólo ahí, podrá morir tranquilo...con el ego en los cielos y con su soberbia al borde de la embriaguez.
¡Qué pobreza de hombre!...¡Qué pobreza de espíritu y valores morales!..¡Qué VERGÜENZA de gobernante que tenemos!
Luois-Dieudonné (1654-1715), fue Rey de Francia y Navarra y copríncipe de Andorra, en 72 años de reinado, se engreía con los halagos y los adulos que con placer los acogía.
Lo llamaron "El Rey Sol" y "Luis el Grande"; el protestante alemán Leibniz se refería a él como "uno de los más grandes reyes que jamás haya existido"; Voltaire dijo de su reinado como "época eternamente memorable" y llegaron a apodar a la era del Rey como el "Gran Siglo". Sin embargo, a su muerte fue despreciado y difamado por sus propios halagadores que mientras vivía, le adulaban hasta la idolatría.
Este infausto Rey, fue Luis XIV, aquel que se hizo famoso por la célebre frase "El Estado soy yo" y presumo que usted Presidente Mashi, se equivocó de época y de reinado porque ni usted es el Estado ni su descendencia lo permite, pués en lugar de Rey usted desciende de un narcotraficante preso por los gringos a quienes usted jamás perdonará.
Finalmente, debo sugerirle a usted Presidente: Deje los rencores a un lado; relájese y escuche a la oposición que no todos son malos; piense que está de salida y con certeza no lo van a reelegir ni a usted, ni a sus ciegos seguidores; no mienta que lo peor que le puede pasar a un hombre es darse de frente con sus propias verborreas; no engañe a los ingenuos; y no nos persiga a los que pensamos diferente a usted "simpático" Presidente.
Atte.-
General Miguel Oswaldo Moreno Valverde