La relación entre ‘Los Sangurimas’ y ‘Cien años de soledad’
Existen varios paralelismos entre ‘Los Sangurimas’ y ‘Cien años de soledad’.
15 de diciembre de 2024 - 15:00
Jacques Guillard sugirió que ‘Los Sangurimas’ inspiró ‘Cien años de soledad’.
Richard Jiménez
La literatura latinoamericana ha sido testigo de obras maestras que se han mantenido a lo largo del tiempo por su gran calidad literaria. Entre ellas, destacan ejemplos notables como ‘Los Sangurimas’ de José de la Cuadra y ‘Cien años de soledad’ de Gabriel García Márquez.
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A continuación, se explora cómo, a lo largo de la historia de la literatura latinoamericana, varios académicos y críticos han sugerido que la primera fue precursora de la segunda, debido a conexiones temáticas y narrativas que enriquecen la comprensión del realismo mágico en la literatura.
Cabe destacar que el interés por ‘Cien años de soledad’ ha resurgido en las nuevas generaciones gracias también al impulso dado por la serie de Netflix sobre esta novela.
El origen de ‘Los Sangurimas’
Según la web del Ministerio de Cultura y Patrimonio, José de la Cuadra, nacido en Guayaquil el 3 de septiembre de 1903, fue abogado, periodista, docente y uno de los grandes escritores ecuatorianos. Publicó obras como ‘La Tigra’ y ‘Los Sangurimas’, esta última su novela más destacada, que retrata la vida montubia con realismo social y elementos de realismo mágico. Aborda las tensiones de una sociedad patriarcal en la Costa ecuatoriana. Su estilo evolucionó del modernismo al realismo social, convirtiéndolo en un referente del cuento ecuatoriano y sudamericano. También destacó como profesor, vicerrector y catedrático, además de ocupar varios cargos diplomáticos. Falleció en Guayaquil el 27 de febrero de 1941.
Paralelismos literarios
Según un artículo de María Isabel Mena, de la Universidad Central del Ecuador, Jacques Guillard, especialista en García Márquez, publicó en 1977 un estudio titulado ‘De Los Sangurimas a Cien años de soledad’ en la revista Cambio, en el que sugería que García Márquez podría haberse ‘inspirado’ en ‘Los Sangurimas’ para escribir su obra maestra.
Desde entonces, teóricos como Fernando Tinajero, Diego Araujo, María Augusta Vintimilla, Miguel Donoso Pareja y Fernando Nina han revisitado la idea de considerar ‘Los Sangurimas’ como una precursora del real maravilloso o del realismo mágico.
Según Jorge Santtori, escritor, docente y librero quiteño, aunque ‘Cien años de soledad’ de Gabriel García Márquez y ‘Los Sangurimas’ de José de la Cuadra comparten ciertos elementos, como el enfoque en comunidades rurales y aisladas, difieren significativamente en estilo y escuela literaria. Mientras que ‘Los Sangurimas’ pertenece al realismo costumbrista y explora mitos y tradiciones de la costa ecuatoriana, ‘Cien años de soledad’ se enmarca en el realismo mágico, caracterizado por la convivencia de lo cotidiano con lo fantástico.
Santtori sugiere que García Márquez pudo haber leído la obra de De la Cuadra, pero destaca que cada novela refleja su propio contexto y crítica social, evitando considerarlas como una continuidad directa. Ambas abordan la tensión entre la modernidad y la tradición, y cuestionan los impactos de la industrialización en América Latina. Pese a las similitudes temáticas, sus narrativas son estilísticamente opuestas: lineal en ‘Los Sangurimas’ y no lineal en ‘Cien años de soledad’.
Contexto histórico y cultural
‘Los Sangurimas’, publicada en 1934, es una obra fundamental del realismo literario ecuatoriano. La novela narra la historia de una familia montubia, centrada en Nicasio Sangurima, un patriarca cuyas acciones y decisiones moldean el destino de su estirpe.
Por otro lado, ‘Cien años de soledad’, publicada en 1967, se ha consagrado como un ícono del realismo mágico, al narrar la saga de la familia Buendía en el pueblo ficticio de Macondo. Ambas obras reflejan las complejidades sociales y culturales de sus respectivos contextos: Ecuador y Colombia durante el siglo XX.
Temáticas compartidas
Una de las similitudes más notables entre ‘Los Sangurimas’ y ‘Cien años de soledad’ es el tratamiento del incesto y las dinámicas familiares complejas. En ‘Los Sangurimas’, se explora la relación incestuosa entre los miembros de la familia, un tema que también aparece en la obra de García Márquez con la relación entre José Arcadio Buendía y Úrsula Iguarán. Esta temática no solo resalta las tensiones familiares, sino que también refleja las costumbres y creencias arraigadas en las sociedades latinoamericanas, siguiendo con un artículo de Gabriela Vargas para la revista Kipus.
Además, ambas novelas presentan un entorno donde lo mágico y lo real coexisten (característica típica del realismo mágico). En ‘Los Sangurimas’, Nicasio Sangurima es visto como un personaje casi mítico, con rumores sobre su pacto con el diablo que le otorga riqueza e inmortalidad. Esta mezcla de realidad y fantasía se encuentra también en ‘Cien años de soledad’, donde los Buendía enfrentan situaciones extraordinarias que desafían las leyes naturales, de acuerdo con un artículo de Alfredo Alzugarat para Kipus.
Estructura narrativa
La estructura narrativa también muestra paralelismos significativos. Ambas obras utilizan un enfoque coral, donde múltiples personajes contribuyen a la historia general. En ‘Los Sangurimas’, cada miembro de la familia aporta su perspectiva a los eventos que se desarrollan, al crear un mosaico narrativo que refleja la complejidad del linaje montubio. De manera similar, ‘Cien años de soledad’ despliega una narrativa intergeneracional que abarca varias décadas, lo que permite al lector observar la evolución y decadencia del clan Buendía, a decir de José Luis Cáceres en un artículo para LL Journal.
Antecedente en el realismo mágico
El impacto de ‘Los Sangurimas’ en el desarrollo del realismo mágico es innegable. Autores como Fernando Alegría han señalado que esta novela sirve como antecedente a ‘Cien años de soledad’. La habilidad de De la Cuadra para integrar elementos míticos con realidades sociales ha sido reconocida como un eco en García Márquez, quien perfeccionó esta técnica para construir su propio universo literario, siguiendo con Gabriela Vargas.
En tiempos recientes, el interés por estas obras ha resurgido entre nuevas generaciones. La exploración de sus conexiones ofrece una perspectiva fresca sobre cómo las influencias literarias trascienden fronteras geográficas y temporales. La relevancia del realismo mágico sigue vigente, aún resuena con lectores que buscan comprender sus raíces culturales, ejemplo de ello es la reciente serie de Netflix sobre ‘Cien años de soledad’.
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