Vinicio Alvarado no es únicamente el cerebro que estuvo tras del estado de propaganda del correato. También es un muy astuto hombre de negocios que no perdió oportunidad para beneficiarse económicamente de la montaña de dinero que supuso ese montaje mediático.
Tan astuto y desvergonzado fue Alvarado que no solo hizo que sus empresas y las de sus parientes hagan negocios con el Estado (la Fiscalía detectó y lo está procesando por movimientos injustificados en sus empresas por 130 millones de dólares): se las amañó para que una importante parte de los aportes ilegales que hicieron compañías como Odebrecht a la campaña electoral del 2013 de Alianza País, también termine en las arcas de sus empresas. ¡Bingo!
De la documentación que sustenta el caso Arroz Verde, hecho público por los periodistas Fernando Villavicencio y Christian Zurita, se desprende que cuatro empresas, relacionadas directa o indirectamente con Alvarado, recibieron dineros provenientes de los aportes ilegales de campaña. Estas empresas son: Creacional, Vértigo Films, Kronopio y Publiélite.
Las historias de estas empresas son ricas en relaciones con el Estado desde que comenzó el gobierno de Rafael Correa, de quien Alvarado siempre estuvo muy cerca como estratega electoral y de comunicación, Secretario de la Administración, Ministro de Turismo o Producción. Alvarado, que ayer fue tendencia en redes sociales por un video en el que aparece siendo escrachado por un individuo que dice haber sido perjudicado por su familia, ya ha sido procesado por la Fiscalía por este caso y deberá dar su testimonio. Según el reporte de Arroz Verde, entre el 8 y 11 de noviembre del 2013, Alvarado autorizó el desembolso de 320 mil dólares para la convención de Alianza País, hecha en Guayaquil; monto que fue pagado a María de los Ángeles Duarte. Y entre el 21 de enero y 6 de febrero de 2014 autorizó la entrega de 1,4 millones de dólares para gastos administrativos del partido de gobierno.
Estas son las cuatro empresas involucradas en el tema.
La empresa nodriza
Creacional es la empresa bandera del conglomerado de la familia de Alvarado. Según los documentos que sustentan el escándalo de los aportes, Creacional recibió 60 mil dólares por “honorarios profesionales” y “marketing publicitario”. Ese dinero provino de los 4,6 millones en efectivo que recibió Alvarado de las empresas que hicieron los aportes al partido, entre esas Odebrecht.
Creacional debe ser la empresa más consentida por el correato. En unainvestigación, diario El Universo, mostró que durante los diez años de gobierno, Creacional reportó ventas por publicidad superiores a los 90 millones de dólares, según la Superintendencia de Compañías, con aumentos anuales sostenidos de entre 30% y 40%. En el 2007 tuvo ingresos por 3,4 millones, los que llegaron a 6,3 millones en el 2009 y a 15,9 en el 2015. Creacional también recibió 446 787 mil dólares en transferencia de los Medios Públicos, administrados por Fernando Alvarado, hermano de Vinicio, actualmente prófugo de la justicia. Además, registra 90 mil dólares provenientes de Televisión Satelital; la empresa que fundaron el ex vicepresidente Jorge Glas y su tío Ricardo Rivera, ambos presos por el caso Odebrecht.
Vértigo Films, la empresa de la hija
Esta empresa, cuya productora era al momento Marcia Alvarado, hija de Vinicio, recibió 50 mil dólares de una de las empresas que hizo aportes a la campaña de Alianza País. Aparentemente, con ese dinero se financiaron piezas audiovisuales para la campaña. Esas piezas igualmente fueron parte del spot “La bicicleta, un retrato íntimo” que se usó en la campaña para la tercera reelección de Rafael Correa. Vértigo Films tuvo una muy provechosa relación con el Estado. Según la investigación de la Unidad de Análisis Financiero y Económico de la Fiscalía, UAFE, los medios públicos realizaron transferencias por 4,8 millones de dólares a la agencia McCann Erickson que, a su vez, contrató a Vértigo Films por 1,3 millones de dólares. Marcia Alvarado, como productora, estuvo a cargo de la campaña “All you need is Ecuador”. La empresa hizo asimismo la producción de la serie “Ciudad Quinde” para la Superintendencia de Control de Mercado por 700 mil dólares.
Lindas comisiones
Kronopio recibió 60 480 dólares por concepto de “asesoría comunicacional”. Si bien no es una empresa de Vinicio Alvarado, Kronopio ha estado estrechamente vinculada a él y a su trabajo. En noviembre del 2016 el grupo Ecuador Transparente divulgó un paquete de correoselectrónicos que pertenecían al publicista Kennet Godwin, dueño de Kronopio. En ellos se evidenció que Vinicio Alvarado benefició esa empresa con muchos y jugosos contratos a cambio de importantes comisiones. Los correos pusieron en evidencia un sistema que Alvarado utilizó con muchas empresas de publicidad durante los 10 años del correato: aquellas que firmaban contratos con el Estado tenían que entregarle comisiones.
Los troll centers de los amigos
Publiélite es otra de las empresas vinculadas, aunque indirectamente, a Alvarado y que también aparece en el informe de Arroz Verde. Ahí se ve que recibió un pago de 22 400 dólares por trabajos hechos durante la campaña. Publiética es una firma que se especializa en campañas en redes sociales. En otras palabras, un troll center. Según una investigación que diario El Comercio hizo en el 2014, Publiélite es una empresa de Juan Carlos Vásconez. Él firmó jugosos contratos con el gobierno de Correa. Su otro accionista era Roberto Puga Chiriboga, hombre de confianza de Alvarado y alguna vez subsecretario suyo en la Presidencia. Vásconez también era dueño de la empresa Ximah que hacía trabajo en redes sociales para el gobierno y que manejaba la cuenta “El Patriota” en Facebook y Twitter, desde dónde se atacaba a las voces disidentes. Ximah funcionaba en las mismas oficinas de Guayaquil de Percrea, empresa de la familia Alvarado Espinel. Publiélite hacía parte de un grupo de cuatro empresas: Ximah, Prosigns y Mercamáxima que se repartían casi todos los contratos con el Estado. Publiélite ganó 1 160 714 dólares por hacerse cargo de la asesoría, gestión y servicios publicitarios digitales del Ministerio de Turismo cuya cabeza era Vinicio Alvarado. Un hermano de Vásconez trabajaba con Alvarado en la Presidencia de la República.
Foto del Ministerio de Turismo
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