martes, 17 de diciembre de 2013

Señor Alcalde



Por: Eduardo Cardoso Martínez
Señor Alcalde:

Nosotros, ciudadanos de Cuenca, con el legítimo derecho de expresarnos ante su autoridad como administrador del municipio local, le comunicamos nuestra preocupación por la implementación del tranvía. Tenemos dudas respecto de su sustentabilidad y real eficacia para solucionar los acuciantes problemas de movilidad y tráfico vehicular que soporta nuestra urbe, por lo que le solicitamos que el proyecto Tranvía de los Cuatro Ríos, sea debidamente explicado y sustentado ante la ciudadanía.

Los documentos de la Alcaldía de Cuenca relacionados con el tranvía, hablan de una demanda ‘inicial’ de 39 millones 792 mil viajes o de pasajes pagados por año-. De cumplirse esta hipótesis el tranvía permitirá una recaudación anual de 8 millones 356 mil 320 dólares, con una tarifa promedio de $0.21. Recaudación que, según sus propios estudios, sería no sólo suficiente, sino que daría alta rentabilidad a la iniciativa de su alcaldía.
Pero la realidad parece distinta. Respaldados con los propios documentos municipales para el tranvía, exponemos lo siguiente:

- Son 14 unidades tranviarias, con una capacidad normal para 200 pasajeros (4 pasajeros/m2) y máxima de 282 (6 pasajeros/m2), de los cuales irían 52 pasajeros sentados.
- La frecuencia de las unidades será de 6 minutos en horas pico – 6 horas diarias- y de 12 minutos en las demás horas -10 horas diarias- aproximadamente 261 días del año.
- En los fines de semana y días festivos, la frecuencia bajará a entre 15 y 20 minutos - (104 días por sábados y domingos, más fiestas cívicas y otros).
- Con esas frecuencias y horarios propuestos para el proyecto tranvía, las unidades tranviarias harían aproximadamente 35 mil 366 recorridos del circuito tranviario en un año.
- Para cumplir los -39 millones 792 mil viajes por año-, cada recorrido del tranvía debería alcanzar a hacer 1.125 viajes - (pasajeros pagando su boleto) - en promedio, todo el tiempo. Dicho en otras palabras cada hora de todos los días del año en los que esté al servicio el tranvía deberán subir a cada unidad tranviaria 1.125 pasajeros. ¡¿Cómo lograr esta meta?! Por favor explique a la ciudadanía.
Tendría que suceder que en cada hora que circule un tranvía y todas las horas de todos los días del año, por cuatro veces, suban 282 pasajeros (máxima capacidad de cada unidad tranviaria) y se bajen todos para permitir que suban al tranvía otros 282 pasajeros. ¿Es esta una meta real y alcanzable en la ciudad de Cuenca…? es real y objetivamente ejecutable…? Sostenemos que no.
- El proyecto tranvía requiere de una recaudación inicial de 5 millones 600 mil dólares para cubrir costos de operación en el primer año y mayores ingresos en el futuro, para lograrlo tendrá que transportar a 26 millones 666 mil 667 pasajeros anuales, es decir que en todo recorrido de cada unidad tranviaria todo el tiempo deberá lograr 754 pasajes, lo que implica que por 2,7 veces por hora se renueve completamente el pasaje y a máxima capacidad en cada recorrido. ¿Será posible que en las horas de menor afluencia de pasajeros –horas valle con frecuencia de 12 minutos-, o los 104 días sábado y domingo de un año así como en los días festivos y en el período vacacional se renueve el pasaje aproximadamente tres veces…?. No.
- Cuando tengan que efectuarse las reinversiones de 20.7 millones de dólares en los años 5, 15 y 30 de operación del tranvía ¿de dónde provendrán esos fondos?
- ¿Qué explicación nos puede dar con respecto a la contaminación ambiental que producirá el tranvía? En los estudios de la municipalidad, al respecto, consta los siguiente:
Emisiones tranvía: 5005 toneladas de CO2 generadas anualmente.
Costo por tonelada de CO2 7.39 dólares ($36.986.95 anuales)

Además de estas observaciones de carácter técnico agregamos las siguientes reflexiones:

Señor alcalde - Reconozca que se ha equivocado con el proyecto tranvía

Señor Alcalde, el proyecto tranvía siguió un curso irregular para su aprobación y puesta en marcha, al punto que ninguno de los concejales del cantón Cuenca puede hablar, hasta ahora, de que lo conocía a cabalidad. Esto le resta legitimidad y quizás hasta legalidad al proyecto ‘Tranvía de los 4 ríos’.

Se dice, que con el tranvía en operación, serán sacados de circulación 75 buses del centro histórico de nuestra ciudad, lo que según los cálculos municipales llevará a 130 mil pasajeros diarios a obligarse a ocupar el tranvía, expectativa difícil de alcanzar dadas las dimensiones y frecuencias que tendrá el tranvía de Cuenca. De los 475 buses actuales, quedarán 400 en circulación generando la misma contaminación ambiental y con una sobre oferta para los 290 mil pasajes o pasajeros restantes (420 mil). Está claro entonces, que ni operando en forma óptima el tranvía es una solución, apenas mitigará parte del problema existente.

El servicio del tranvía empezará con una tarifa de 25 centavos de dólar, pero no se dice con claridad a los usuarios del servicio de transporte público, que tendrán que pagar adicionalmente por el o los tramos del viaje que tengan que ocupara el bus, los que hace que la tarifa se duplique, se triplique, o que llega hasta a un dólar el algunos casos. No se trata, por tanto, de un sistema integrado de transporte en esta materia.

Desde el punto de vista de la afección al patrimonio arquitectónico y cultural, no hay que perder de vista que el tranvía atravesará por dos arterias viales patrimoniales de la ciudad, como son las calles Gran Colombia y Mariscal Lamar. Para construir la plataforma del tranvía por estas calles será necesaria la revisión y reposición integral de los sistemas de agua potable y alcantarillado, las conexiones domiciliares de estos servicios, así como de algunos servicios de electrificación, semáforos, cable y telefonía existentes. Se trata de una plataforma de hormigón de 60 centímetros de espesor a lo largo de la ruta del tranvía, lo que implicará una excavación a profundidades considerables (1m a 1.50m o más si hay que reconstruir el alcantarillado) para reponer y adecuar los servicios básicos y dar soporte a las 52 toneladas de peso que tendrá el tranvía, cuando vaya a máxima capacidad. Será removido un elemento patrimonial como el adoquín de piedra andesita, y el paso de las unidades tranviarias dificultará la apreciación de puertas y fachadas del siglo XIX de estilo neoclásico y algunas coloniales.

¡¿Qué va a pasar con los negocios asentados a lo largo de esas calles?! El cambio de la actividad laboral al transitar 130 mil personas diarias por las calles Gran Colombia y Lamar incrementará la inseguridad porque es previsible que aumente la delincuencia y el tráfico de drogas.

Se ha dicho que el tranvía está atado a la permisividad que dé el Municipio de Cuenca al gobierno para la explotación minera a gran escala en Quimsacocha, proyecto gubernamental que implicaría la contaminación de las aguas que alimentan los ríos Tarqui, Yanuncay y Tomebamba. Esto sería un precio muy alto a pagar por un proyecto mal planteado y de dudosa auto sostenibilidad económica.

Señor Alcalde, no necesitamos ni el tranvía ni la minería a gran escala. La mayor potencialidad de la ciudad de Cuenca es ser Patrimonio Cultural de la Humanidad. Tenemos un alto potencial cultural y artístico inagotable gracias a nuestra gente. Somos dueños de nuestro propio desarrollo y la única revolución que necesitamos es por la defensa de la tierra y del agua.

Señor Alcalde, escuche nuestras voces. No desestime nuestra capacidad de discernimiento. No nos subestime. Está aún a tiempo para reconocer honorablemente, que se equivocó con el proyecto tranvía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario