Los masáis tenemos un compromiso sagrado con nuestros ancestros:
proteger este territorio y su delicado equilibrio biológico. Gracias a esa promesa, la vida prospera en nuestras llanuras… y precisamente por eso el gobierno pretende explotarlas para el turismo de lujo.
Allí donde los masáis vemos vida y amor, los poderosos solo ven dinero.
El mismo patrón se repite por todo el mundo: quienes preservamos las selvas, los humedales y las sabanas sufrimos acoso y desalojos forzosos sin apenas recursos para defendernos.
En esta batalla, la comunidad de Avaaz ha sido una fiel aliada de los masáis.
Gracias a su apoyo hemos conseguido victorias fundamentales, pero parece que el gobierno está planeando más expulsiones y no podemos permitirnos más gastos judiciales. Con dinero suficiente, Avaaz podría:
- Financiar la defensa legal masái, aportando fondos para la investigación, la recolección de pruebas y un equipo de asesoramiento jurídico que impida los desalojos y libere a las personas detenidas ilegalmente.
- Apoyar a las comunidades indígenas que luchan para impedir la construcción de un oleoducto colosal que partiría en dos África Oriental.
- Respaldar las protestas de los líderes indígenas amazónicos contra la minería, la tala y la agroindustria que están destrozando la selva.
- Organizar campañas urgentes en defensa de los derechos indígenas y del equilibrio de la Tierra.
Si los masáis del Ngorongoro podemos luchar, es gracias a las victorias legales que hemos conseguido gracias a Avaaz y a la gente como tú. Ahora te necesitamos de nuevo: ayúdanos a financiar nuestros casos judiciales y a defender los derechos de los pueblos indígenas de todo el mundo. Dona ya lo que puedas:
No hay comentarios:
Publicar un comentario