jueves, 4 de julio de 2019

POR: Galo Muñoz Arce

 Publicado en la Revista El Observador, edición 111, Junio de 2019

Gustavo Larrea Cabrera
Quiteño, 66 años de edad, abogado de la república, hijo del Dr. Hugo Daniel Larrea, de Ibarra y doña Silvia Cabrera Izquierdo, de Gualaceo, provincia del Azuay. La política le entró por la sangre, sus orígenes datan desde la época de la independencia, Juan Larrea, posiblemente su tátara abuelo, fue un Patriota y prócer de la independencia nacido en la ciudad de Riobamba en el año 1759, hijo del Gral. José Manuel de Larrea, de los Ejércitos Realistas, y de la Sra. Rosa Villavicencio y Guerrero.

Juan Larrea, tuvo importante participación en todos los movimientos que culminaron con la Revolución del 10 de Agosto de 1809; integró como Secretario Ministro la nueva Junta de Gobierno que se formó y se encargó del cuidado de la Hacienda Pública.

Al ser desbaratada dicha junta fue capturado y encerrado en los calabozos del Cuartel Real de Lima, pero pudo fugar y se salvó de ser una de las víctimas del Asesinato de los Patriotas Quiteños perpetrado el 2 de agosto de 1810. Fue uno de los pocos patriotas del 10 de agosto que alcanzó a ver la Patria libre, y a los 65 años de edad murió en la ciudad de Quito, en el año 1824.

Dando continuidad a este legado, Gustavo Larrea Cabrera, se integra a la edad de 12 años a la lucha política contra las dictaduras en la década de los años 60 y 70, como líder estudiantil, levantando como bandera “DICTADURA NO, DEMOCRACIA SI, nombre que marcará la organización política que dirige  desde hace cuatro años con aspiraciones de ocupar el palacio de Carondelet en el 2021.

El doctor Gustavo Larrea, envió un saludo a la Revista “El Observador” por sus 21 años de lucha en defensa de la libertad de expresión. Auguró a su director Lic. Jaime René Cedillo Feijóo y colaboradores, que sigan adelante en esta noble visión periodística, haciendo honor a su lema: “la libertad de expresión, ni se compra, ni se vende, ni se transa”. 

¿Cuál es el modelo político para que en Ecuador haya gobernanza?
“No es posible encontrar modelos sociales que vengan desde afuera, por más exitosos que sean. Nuestro país a diferencia de Perú, es el país de la papa, del maíz, del cacao, del banano, de la mora, el tomate, etc, hemos alimentado al mundo desde  cientos de años. No tenemos que inventar ningún modelo en un país de profundas raíces geográficas, que cuenta con una  diversidad humana, ecológica y cultural”.

¿Gustavo Larrea y Alberto Acosta considerados ideólogos de la Revolución Ciudadana, ambos  distanciados de esa tendencia política, ¿qué pasó?
“Alberto Acosta, se separó muy temprano como Ministro de Gobierno, luego me tocó el turno como Ministro del Interior. Inicialmente apoyamos el sueño de una Revolución Ciudadana, Democrática que entienda que el recurso social es fundamental y que la participación del pueblo es indispensable. El ejercicio  del correismo dio lugar a formas  de concentración  del poder, represión y disciplinamiento de  la sociedad pocas veces registradas en nuestra historia. No solo que sacrificó la independencia de las funciones estatales, sino que estructuró un aparato de control policial sobre todas las esferas de la vida pública”.

Los procesos de integración autollamados progresistas que se vivieron en algunos países de América Latina, conocidos como Socialismo Siglo XXI, fracasaron rotundamente, ¿por qué?
“Sigo creyendo que América  Latina tiene que ser “una nación de las naciones”. Es un error vivir separados desde México hasta Argentina, cuando debemos ser una sola república federal. 
Pero, nosotros no traicionamos al proceso de integración y progreso, quienes traicionaron fueron los que escogieron el autoritarismo, la criminalización de la protesta social, el fraude y la corrupción como métodos antidemocráticos que no contribuyen a mejorar la sociedad”.

Para algunos analistas políticos, el “Morenismo”, es la continuidad del “correismo”.
“Considero que el modelo autoritario e hiperpresidencialista se rompió el 24 de mayo del 2017. Hay cinco aspectos que debemos evaluarlo, desde el orden estratégico y no coyuntural: 
1. La democracia, las libertades  los derechos humanos. Hay un cambio, por citar  la libertad de expresión, ya no hay medios censurados, periodistas perseguidos ni encarcelados.
2. En la Consulta Popular del 4 de febrero del 2018, el pueblo dice no a las elecciones indefinidas.
3. Se creó el Concejo de Participación Ciudadana y Control Social, transitorio, para que esta institución nombre por  concurso a las autoridades del Estado;  y, el autoritarismo pierde peso. 
4. Hay una desconcentración del poder: el vicepresidente, los ministros, los funcionarios jerárquicos, la Corte de Justicia, el Concejo Nacional Electoral, gozan de autonomía en la toma de decisiones.
5. La lucha contra la corrupción, la presión de la ciudadanía porque haya transparencia. La administración de justicia, poco a poco va cambiando el panorama político y no es lo mismo que la impunidad política que existía en el Ecuador, en donde “no pasaba nada”. En cuanto al fondo social se ha recuperado  15 millones quinientos mil y se viene trabajando por recuperar el patrimonio económico de los ecuatorianos”.

¿Cuál es el balance de los resultados electorales en las elecciones seccionales de marzo del 2019, para el movimiento Democracia SI?
“Muy positivo, tuvimos una excelente votación con más de dos millones de votantes y nos ubicamos como la segunda fuerza electoral del país, al alcanzar 35 alcaldías, 5 prefecturas, en donde se destaca la provincia del Azuay, seis alcaldías, con  Pedro Palacios a la cabeza. 
No vamos a ser una alcaldía partidaria sino amplia y respetuosa a la ciudadanía sin  cometer el error de hacer alcaldías partidistas. Es necesario  la confluencia de las fuerzas progresistas y un proyecto programático de futuro.
No me considero aún, un candidato presidencial, No tengo aspiraciones personales ni vanidad,  me someteré a la voluntad de la agrupación política Democracia SI y las fuerzas que nos apoyan.
Esta de acuerdo con las concesiones mineras del actual gobierno a las empresas transnacionales?
“No se trata de satanizar a la minería, hay que tener una minería con responsabilidad rigurosa pero necesaria. La armonía con la naturaleza  es un proceso que debemos construirlo con la innovación de cambios tecnológicos urgentes. No se trata de cambiar por decreto sino que obedece a un cambio tecnológico y cultural. Hay tecnología contaminante, pero también tecnología responsable.
Hagamos que en estos próximos 10 años no tengamos vehículos a gasolina, que todos sean eléctricos, a sabiendas que es un proceso que puede funcionar”.

NOTA DE LA REDACCION
Con el respeto que se merece nuestro entrevistado, “creer que la megaminería es un “motor de desarrollo”, que impulsa la economía nacional, es un mito. No hay un solo país en el mundo que haya conseguido su desarrollo teniendo la megaminería como eje fundamental de su aparato productivo.
Las zonas donde se han implantado proyectos mineros quedan  completamente degradadas. En el campo social no hay una mejoría de las condiciones de vida de la población. La minería es la segunda industria más contaminante del planeta  que trae mega impactos, ecocidio y no habrá dinero que alcance para  la remediación.
Después que se va la compañía minera, deja huellas imborrables que le toma a la madre naturaleza, cientos, a veces miles de años, las aguas quedan envenenadas y el espacio queda muerto.
Los ecuatorianos nunca olvidaremos, esa afrenta tan grande que se nos hace, so pretexto del amor al “vil metal” a costa de la destrucción de nuestro entorno natural y el consiguiente deterioro de nuestra calidad de vida. Finalmente, en dónde están los derechos de la naturaleza, tan cacareados por el gobierno. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario