El observador

Ecuador Esquiroles correistas empiezan a cuestionar al gobierno

Las bases del Parlamento Laboral se oponen a temas contemplados en las reformas y dudan de la Asamblea.

Desconfianza de que en las enmiendas constitucionales se recojan las aspiraciones de los obreros, desconfianza del poder de decisión de la Comisión de Enmiendas y de la Subcomisión de los Derechos de los Trabajadores y críticas a la política laboral del Gobierno es lo que expresaron ayer durante una asamblea las bases del Parlamento Laboral Ecuatoriano, central sindical que, como se dijo incluso en la cita, apoya y se identifica con el proyecto político de PAIS.

Las bases fueron convocadas por sus dirigentes nacionales para que se pronuncien sobre el camino a seguir dentro del diálogo con la Subcomisión que busca reformar la Ley de Servicio Público (Losep) y modular las enmiendas para que se incorporen contemplados en el Código de Trabajo a la Losep para todos los servidores públicos, antiguos y nuevos.

A la reunión asistió el legislador Fausto Cayambe (PAIS), presidente de la Subcomisión e integrante de la Comisión de Enmiendas, quien les aseguró que estaban en buen camino porque con los cambios se les reconocerá el derecho a la huelga, el de organización – sindicalización y que no habrá diferenciación obreros – funcionarios sino que todos entrarían en esta última categoría. Tras su exposición, Cayambe se retiró.
El debate interno

Tras la salida y luego de breves intervenciones de los dirigentes se dio el debate interno con las bases, quienes, en general, coincidieron, en lamentar que el legislador no se haya quedado a escuchar sus observaciones, que fueron varias.

Por ejemplo, a Noemí Romero, de la Organización Sindical Única de Trabajadores de la Salud (Osutransa), le queda la duda de que las propuestas del Parlamento sean tomadas en cuenta en las enmiendas cuando desde algunos sectores del oficialismo hay la propuesta de que la aprobación final de los textos se lo haga en Montecristi. “Para mí es muy preocupante, porque eso habla de que si se van allá se pierde la posibilidad de que los trabajadores hagamos una marcha, un reclamo muy justo y necesario”, dijo Romero.

Wilson Hernández, secretario general del Sindicato Único de Trabajadores del Municipio de Otavalo, cuestionó el proceso de socialización de las enmiendas porque, dijo, se lo hizo “con afiliados al Gobierno” y no con los trabajadores.

Mientras que José Limaico, sindicalista del sector eléctrico, cuestiónó que se les ofrezca reconocer en la Losep el derecho a la huelga cuando en la actualidad por reglamentación laboral se les está privando de ese derecho. “Y en este Gobierno también nos dividió al movimiento laboral y hoy nuestra fuerza es incipiente”, dijo el dirigente.

Otros cuestionaron aspectos de la Ley de Justicia Laboral, la supresión del 40% de aporte obligatorio a las pensiones jubilares, entre otros asuntos. En un tema que coincidió la mayoría es que, aunque Cayambe se comprometa a tomar en cuenta los criterios de los trabajadores, eso no depende solamente de él, sino de todos los asambleístas de PAIS, y directamente del Presidente de la República.

“No creo que es el que decide. Ustedes van a ver cómo salen las enmiendas y espero que hagan un análisis sensato de cómo enviamos a la Corte Constitucional, cómo volvió de la Corte, cómo se analizó en el primer debate y después cómo aprobemos”, respondió Cayambe. (HCR)

Otras dudas

Pero las dudas de la efectividad de la Legislatura para hacer prevalecer su criterio también la expresan los dirigentes del Parlamento Laboral. Su presidente, Fernando Ibarra dijo que espera ser recibido en audiencia por el presidente, Rafael Correa, porque cualquier acuerdo que se logre a nivel de Comisiones tiene que ser conocido y aceptado por el Mandatario.

“Es imprescindible una reunión con el Presidente de tal manera que él también quede satisfecho con lo que su bloque se asambleístas está haciendo. (…) El Presidente de la República es el presidente de Alianza PAIS”, dijo Ibarra.