#URGENTE | "Gaza será totalmente destruida, los civiles serán enviados al sur, a una zona humanitaria sin Hamás, y desde allí comenzarán a partir en grandes cantidades hacia terceros países", afirmó Smotrich, perteneciente a la formación de ultraderecha Partido Sion*sta Religioso, en una conferencia sobre los asentamientos judíos en Cisjordania ocupada.
Hamás es un grupo militante y el mayor partido político de territorios palestinos. Hamas está comprometido con la resistencia armada contra Israel y con la creación de un Estado palestino. Es el único grupo pequeño que se encuentra en la defensiva de Gaza para proteger a su población del genocid*o en curso dirigido por Israel, pero medios de comunicación occidentales lo han tachado de grupo terrorist* haciéndole juego a la narrativa israelí para justificar el extermi-nio.
Aun en el hipotético caso que Israel pretenda acabar únicamente con Hamás, la ocupación de territorios palestinos, su destrucción y desplazamiento de población no tiene justificación y constituye un crimen de lesa humanidad.
El objetivo declarado es la derrota total de Hamás y la ocupación completa de Gaza. La ofensiva israelí llamada “Carros de Gedeón” fue diseñada para desarrollarse tras la visita de Donald Trump a Israel prevista para la próxima semana.
El nuevo plan contempla una ocupación prolongada y la creación de zonas militarizadas israelíes, lo que ha despertado fuertes críticas. La coalición de familiares rehenes de Hamás acusó al gobierno guerrista de Benjamin Nethanyahu de poner en riesgo sus vidas mientras que organizaciones de DDHH advierten una inminente catástrofe de la región.
Tras más de un año de ataques Israel ha dejado un saldo de más de 52.000 palestinos muert*s según cifras oficiales, aunque algunos estudios como el de la revista científica “The Lancet” señala que las cifras son mucho más altas, superando los 64.000, la mayoría de víctimas mujeres y niños. La guerr* degrada también los sistemas de información sanitaria.
Durante más de un año Israel ha bombardeado impunemente escuelas, hospitales, refugios, zonas civiles, barcos con ayuda humanitaria, ha bloqueado el ingreso de alimentos usando el hambre como arma de guerr* y ha asesinad* a al menos 171 periodistas que se encontraban documentando la masa-cre
Es el fin de todo. Cuando un jefe de gobierno anuncia ante las cámaras, sin temblarle la voz, que desplazará por la fuerza a un pueblo entero “para su protección” tras bombardearlo durante más de 577 días, cuando se consiente un genoci-dio, lo que vemos no es solo la culminación de una política de extermi-nio. Es la quiebra total del marco civilizatorio que nos hacía creer que había límites.


Fuentes: Spanish Revolution, Agitación, El país, Primicias.
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