El observador

 EL DOBLE DISCURSO DEL ALCALDE "TRUCHO"

POR JAIME CEDILLO FEIJÓO

"A veces cuando veo lo que pasa en el mundo, me pregunto: ¿Para qué escribo? Porque el impulso de uno sería gritar todos los días al despertar en un mundo lleno de injusticias y miserias de todo orden: ¡Protesto!

Federico García Lorca

En apenas seis meses de "gestión" el alcalde de Cuenca, Cristian Zamora, ha hecho "maravillas" en la administración municipal. Primero, no olvidemos que ganó las elecciones con apenas el 18, 56 por ciento de los votos, lo que quiere decir que el 81,44 de los ciudadanos le dijeron NO.

Su bandera de campaña fue la terminación unilateral del contrato de los fotorradares, armado por la administración de Palacios, para, según decía Zamora, meterle la mano al bolsillo de los cuencanos. Repitió una y mil veces que el contrato era trucho, lesivo, leonino, que la contratista Movil Technology, se iba a llevar millones de dólares por concepto de multas, por lo tanto, había que poner punto final. Se venía la terminación unilateral . ¡Qué alegría! Y, así lo hizo, armó un show con su séquito de adulones, para apagar los fotorradares en la autopista Cuenca-Azogues. Luego vino el anuncio inesperado y traicionero: el convenio se ponía fin con una suma de 3 millones 307 mil dólares a favor del contrato trucho. Los términos del tristemente célebre acuerdo, por mutuo acuerdo, entre las partes nunca se hizo público, todo fue elaborado entre gallos y media noche, con el silencio cómplice de los concejales, de la comisión de fiscalización, que hizo mutis por el foro.

Los millones que acordó Zamora entregar por los fotorradares leoninos, pagará el pueblo: 3 millones 307 mil dólares, más el porcentaje por concepto de multas, el jugoso negocio, ascendería a más de 5 millones de dólares. Con esos amigos, para qué enemigos.

Qué pasó con el anuncio de la presidenta de la comisión de fiscalización del Concejo Cantonal, Diana González, que ofreció entregar un informe sobre el contrato lesivo en 15 días. No pasó absolutamente nada, todo quedó enterrado, en el olvido, la desidia y el quemeimportismo, por cumplir con uno de los dos deberes básicos que tiene un concejal: fiscalizar, ganó la partida.

El doble discurso de Cristian Zamora es evidente, una cosa es lo que ofreció en campaña y otra, muy diferente, lo que hace desde el sillón de la alcaldía de la Cuenca engañada. Recuerden observadores, que el aprendiz de burgomaestre, prometió que los mejores profesionales especializados en cada área ocuparían las direcciones, gerencias y todos los puestos de trascendencia en su administración. Que manden los currículos, que la hoja de vida, que los estudios superiores tendrán prioridad, que las maestrías y doctorados. Todo fue un engaño, porque los puestos burocráticos ocuparon sus agnados y cognados, los de su agrado, sus panas, así sean zotes. Los ilusos pasaron el tiempo, se quedaron con los churos hechos. Basta nombrar unos ejemplos: Para la dirección de Gestión Ambiental, designó a su pana Carlos Orellana Barros, que de gestión ambiental no conoce de la misa a la media. Juntos, Zamora y Orellana, cuando ejercieron de concejales, votaron a favor de la destrucción de la laguna de Illincocha en el Cajas, (cambiando el uso de suelo) para que se construya una estación del Cuerpo de Bomberos. Aquí, como en otros casos, la justicia está en deuda, porque todavía no sanciona a los infractores, a los depredadores de la Madre Naturaleza.

En la gerencia de la empresa de aseo (EMAC) nombró a una comunicadora, María Caridad Vásquez (correísta), seguramente para pagar favores políticos. Que nos muestre el señor alcalde los estudios de especialización en manejo de desechos sólidos de la señora Vásquez. Al menos un curso de capacitación en recolección de basura, o mantenimiento de espacios verdes."El manipulador siempre te culpará de lo que él mismo provocó".

En la dirección de Áreas Históricas y Patrimoniales, el segundo puesto más importante lo ocupa una persona de nombre Raúl David Valdiviezo Codena, que firma como profesional, pero en la SENECYT no registra título de tercer nivel, ni nada por el estilo. Dice en su hoja de vida que es Licenciado en Historia, con educación superior en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador. Firma como profesional pero no encontramos ni siquiera título de bachiller. En la Dirección de Áreas Históricas se desplazaron a verdaderos expertos para en su lugar imponer a los recomendados del señor alcalde de la Cuenca desencantada por tantas vivezas criollas.

Irrespetando la Ley de Ejercicio Profesional del Periodista, nombró a un tecnólogo como Director de Comunicación, Jorge Revilla Saquicela. Así de simple, hace lo que le viene en gana. Se cree con derecho de hacer y deshacer en la administración municipal a su antojo. Los resultados están a simple vista, aunque se llene la boca diciendo que es el mejor alcalde del país. Dime de qué presumes y te diré de qué careces.

El Concejal Xavier Bermúdez, denunció irregularidades en procesos de contratación pública, y a cambio recibió amenazas de juicio de Zamora. Lo más escandaloso fue la pretensión fallida de traer a un tal Luisto Comunica (youtuber mexicano), pagándole la jugosa suma de 275 mil dólares para que dicte una conferencia. Claro, el proceso se cayó por las anomalías. Zamora se quedó con los churos hechos, mientras que Bermúdez, brilló con luz propia.

Otra denuncia de Bermúdez que fue suspendida por la SERCOP tiene que ver con el sueño de Zamora de comprarse un blindado para ir de su casa a la oficina y viceversa.

Una acusación que circula es un proceso por 47 mil dólares denominado consultoría para la determinación de estrategias de comunicación y publicidad institucional. Lindo pretexto para derrochar el dinero ajeno. En arca abierta el justo peca.

Luego llegó el momento de discernir las preseas que el Concejo Cantonal entrega el 3 de Noviembre a los hijos de la Culta Cuenca, por sus aportes invaluables en los diferentes campos del saber. Y, oh sorpresa, la Presea "Fray Vicente Solano", se anunció con bombos y platillos, para el otrora cliente del chulquero (el Notario Cabrera), Iván Saquicela. Sí señores, nada más y nada menos. Zamora y el Concejo Cantonal mancillaron la Presea "Fray Vicente Solano", porque el beneficiario nada tiene que ver con el mundo de la cultura, peor de la intelectualidad (dicho sea de paso con raíces de San Francisco de Peleusí de Azogues). Pero así se congratulan, se adulan, se intercambian elogios. Pocas voces se levantaron para protestar por semejante aberración, la mayoría prefirió el silencio. Así es la Cuenca pacata.

Para colmo de los colmos, Zamora intervino en un programa denominado Castigo Divino, que realiza un tipo de apellido Vivanco, donde se saca a relucir lo peor del "periodismo", con preguntas burlescas, con un lenguaje vulgar, indigno del buen periodismo, con ofensas, risas y risotadas por la hazaña, por el improperio, por la ofensa a la mujer, por las visitas al chongo, (como eso de qué hijue puta que eres). Entre vino y vino, fue una conversación entre patanes de barrio. El que sacó la peor parte, fue, sin duda, el que nos "representa" a los cuencanos, porque se desnudó y se dejó ver ante la faz pública quién era verdaderamente el que ganó las elecciones con apenas el 18. 56 por ciento de votos: CRISTIAN ZAMORA MATUTE.

"A mi me miran con el rabo del ojo, yo les miro con el ojo del rabo".

Fray Vicente Solano

CONTINUARÁ