domingo, 21 de julio de 2024

 

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Dentro de unos días, la presidenta de Tanzania podría condenar a muerte a los elefantes más majestuosos de África al conceder nuevas licencias que permitirán a millonarios aficionados a la caza “deportiva” matarlos por pura diversión. Científicos, conservacionistas y pueblos indígenas han dado la voz de alarma y no hay tiempo que perder. Respondamos a su llamada y ampliemos la petición en defensa de los elefantes de Amboseli para que el gobierno no la pueda ignorar:
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Queridos amigos y amigas:
Dentro de unos días, la presidenta de Tanzania podría condenar a muerte a los elefantes más majestuosos de África concediendo nuevas licencias con las que millonarios aficionados a la caza de trofeos puedan matarlos por mera diversión.

Estos elefantes pertenecen a los llamados “súper colmillos”, una población de machos que los científicos llevan más de 50 años estudiando. Recientemente, un grupo de investigadores ha descubierto que usan nombres específicos  para comunicarse entre sí, ¡la primera vez que se observa algo así en animales aparte de los humanos!

Durante décadas, los elefantes de Amboseli han cruzado libremente y sin peligro la frontera entre Kenia —donde la caza de trofeos está prohibida— y Tanzania, hasta que la temporada pasada, el gobierno tanzano permitió que mataran a cinco machos adultos machos. Al menos dos individuos pertenecían a estos escasos “súper colmillos”.

Los científicos, los conservacionistas y los pueblos indígenas han instado a la presidenta de Tanzania a detener la matanza y proteger a los paquidermos antes de que sea demasiado tarde. Este mes, el gobierno tanzano debatirá si se otorgan o no más permisos para la próxima temporada, no hay tiempo que perder. Sumemos nuestro nombre a su petición para demostrar que la ciudadanía del mundo entero está con ellos:
Hay un motivo por el que esta población transfronteriza de elefantes lleva tanto tiempo protegida: forman parte del estudio de elefantes más antiguo y exhaustivo del mundo, un trabajo de décadas que ha contribuido significativamente a nuestro conocimiento de estos majestuosos animales.

Además de ocupar un papel central en la compleja estructura social de los grupos de machos, donde ejercen de maestros y mentores, son los compañeros preferidos por las hembras. Pertenecen a uno de los últimos reservorios genéticos con colmillos excepcionalmente grandes y, según los expertos, su pérdida dejaría a la población en una situación insostenible.

Los conservacionistas han puesto el grito en el cielo y han acudido a nuestra comunidad pidiéndonos que les apoyemos enviando un mensaje global para decir a la presidenta de Tanzania que el mundo no permanecerá de brazos cruzados mientras su gobierno vende a los elefantes al mejor postor. Suma ya tu nombre y entregaremos la petición junto con nuestros aliados locales para que los dirigentes no puedan pasarla por alto.
En Avaaz siempre hemos pensado que las personas y la naturaleza deberíamos convivir en armonía. Y siempre hemos luchado por esta visión del mundo, ya sea denunciando la crueldad del comercio de marfil o consiguiendo medidas de protección para los elefantes en la sesión sobre especies en peligro de extinción de las Naciones Unidas. Es momento de volver a actuar.

Con esperanza,

Antonia, Miguel, Abdelrahman, Gordon, Pascal, Sarah y todo el equipo de Avaaz

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