El observador

LES VALE...

POR JAIME CEDILLO FEIJÓO

El socialcristiano Henry Kronfle, nos resultó un sabido. Así dicen los "monos", este es un sabido. Salió electo presidente de la Asamblea Nacional, luego de los amarres entre los correístas, noboistas y nebotsistas. Las trincas políticas de la regalada gana, una vez más, se alzaron con todo el poder legislativo. Las promesas de hacer una gestión limpia, de trabajar con decencia y honestidad, se llevó el viento. El "mono" es un títere de las mafias políticas, de los patriarcas de la componenda. Le ordenaron que deje la curul, que se vaya de vacaciones, para que los correístas puedan resolver sus asuntos sin estorbos, ni nada por el estilo. Regresó al sillón presidencial cuando todo se había consumado (caso Glass).

El "mono"cuando fue asambleísta en el período anterior, aportó poco en la presentación de leyes en beneficio del país; ni siquiera fue un legislador cumplidor de sus obligaciones en el pleno. Es decir, pasó completamente desapercibido; claro, pero cobraba puntualmente sueldo y todas las prebendas que tienen por hacer "Patria".

Ahora, el "mono" está exigiendo al Ministerio de Finanzas, nada más ni nada menos que 67.6 millones de dólares para gastos del 2024.

Con esa millonaria suma, seguro que los padres y madres de la Patria, se darán una gran vida. Gastarán el dinero de los contribuyentes a manos llenas, en remuneraciones, boletos aéreos nacionales, vuelos internacionales que son más de placer que por trabajo, viáticos, gastos de representación, vivienda para los que viven fuera de Pichincha. Los millones alcanzarán para el parto y reparto.

En tiempos de vacas flacas, exigir, a cambio de votos, esa suma es una irresponsabilidad. En dónde está un poco de delicadeza y comprensión frente a la grave crisis económica en que nos dejó hundiendo el gobierno de Lasso, triste personaje que no dudó en mentir frente al país, afirmando que las deudas con los municipios y consejos provinciales, estaban al día. Ahora sabemos que esa deuda al término de su nefasto gobierno no fue saneada, dejó como herencia para el gobierno del "acartonado" Noboa.

Saben cuánto gana un asambleísta por asistir a las sesiones del pleno de martes a jueves, porque eso es lo que trabajan la mayoría de "becados", 4.759 dólares. Más todos los beneficios anotados. Es decir, al pueblo nos cuesta un ojo de la cara mantener una institución dedicada al reparto de la trocha, a los acuerdos bajo la mesa, la entrega de ministerios. Cuando pensamos que las cosas cambiarían, luego de tantas lecciones nefastas protagonizadas por los de siempre; asistimos al mismo circo, con los mismos truhanes que tanto daño nos han hecho. Allí están los de ayer, los que fueron cesados, pero también hay nuevos que hacen minoría, que pesan poco a la hora de las decisiones, de las votaciones, que tratan de pellizcar algo.

Volvemos a tener una Asamblea contaminada, poco transparente, sin principios ni valores. Les vale lo que piense el pueblo, les vale lo que les digan, les vale que sean desenmascarados, les vale ser parte de los desprestigiados, les vale madre ser actores de los peores escándalos. Quieren "comerse" a la Fiscal para alcanzar la soñada impunidad. Para alcanzar el objetivo el "mono" sabido está listo para hacer el papel de tonto útil de la banda correísta y todos sus secuaces.

"Puedes ponerte todas las máscaras que quieras, pero tus acciones siempre dirán quién eres".