lunes, 12 de junio de 2023

 La doble MORAL

Ciertos oportunistas caen estripitosamente de la cima de la gloria a la sima del abismo y la execración pública.
Uno de los líderes de la Izquierda Democrática, el concejal Iván Saquicela, ha causado un mare magnum al interior del partido por ser un acreedor del notario José Cabrera. Depositó 12.000 dólares entre marzo y junio del año 2005 y hacía mutis por el foro esperando que nadie lo señalase con el dedo.

Pero las malas artes del engaño, conspiraron esta vez contra él para mostrar su falso discurso pues por un lado se rasgaba las vestiduras en contra de la corrupción y a favor de la transparencia, y por otro, en su vida privada, hace de las suyas porque en él no existen ni principios ni valores de persona proba.
Saquicela inicialmente negó a la prensa haber depositado dinero en las cuentas del notario indicando que se trata de una equivocación pero en vista de que las evidencias eran contundentes admitió haber entregado 12.000 dólares a Cabrera.
Sus ambiciones desmedidas para llegar a la presidencia del Partido y la diputación provincial se quedaron truncas cuando estalló el escándalo y justo cuando pensaba que las cosas iban viento en popa para sus exageradas pretensiones, fue denunciado como usurero y el directorio provincial de la Izquierda Democrática pidió su expulsión ante el Tribunal Nacional de Disciplina de dicho partido.
CARLOS González se pronuncia
El diputado Carlos González se desacreditó absolutamente por la doble moral que mostró para juzgar este asunto que atenta contra la ética pues dividió a los acreedores del notario Cabrera en dos grupos: los ingenuos, entre los que se encontraría Saquicela, los cuales no tienen culpa y los grandes usureros que sí tienen culpa, y enseguida solicitó solidaridad y comprensión para su coideario.
Para defender lo indefendible, González ofendió a la prensa, acusándola de mala fe y premeditación para analizar el caso Saquicela . Su protección al concejal parece un acto de caridad hacia quien, años atrás, se conducía como tiralevita de los líderes del partido en la provincia. Inclusive llegó a manifestar que defendía al concejal porque él está en el lado de los débiles y los caídos.
El Colegio de Periodistas del Azuay, la UNP, la UPA y la Asociación Ecuatoriana de Radiodifusión, han rechazado los ataques de González y cuestionan su doble moral para juzgar las cosas ante un caso tan grave.
PREFECTO lo defiende y se calla
Paúl Carrasco también demostró doble moral en este caso pues inicialmente defendió a Saquicela, su compañero de fórmula para la presidencia del Partido, manifestando que: Iván ha enfrentado valientemente, ha dicho la verdad, esa es la forma de hacer política, no especulativa, no negar la realidad. Después lo eliminó como su binomio a la dirigencia provincial admitiendo públicamente que Saquicela ya no es su compañero pues Iván tendrá que responder por sus actos y actualmente guarda silencio cada vez que le piden un criterio.
PIDEN su renuncia
La opinión pública exige que Saquicela renuncie a la concejalía por ética y moral, ya que el edil olvidó que como funcionario de elección popular debía cuidar más sus actuaciones de la vida privada, al estar sujeto al escrutinio ciudadano de quienes confiaron en él para representarlo pues la probidad, honestidad y corrección en el proceder son cosas que se deben precautelar en el obrar de las autoridades.
Así también, varios personajes opinan que el concejal debería renunciar: Félix González, presidente del Partido Socialista; John Delgado, presidente de la Democracia Popular; el mismo presidente de la ID, Diego Monsalve; la diputada Ana Lucía Cevallos; así también, los concejales Flor María Salazar, María Caridad Vázquez, Gustavo Vega Delgado, Ecuador Alvarez, Jorge Piedra, Jorge Molina han expresado fuertes criterios en el sentido de que por calidad moral, Saquicela debe renunciar a su cargo de concejal como lo hizo Aquiles Jimbo, Gerente de la EMTET, quien también había depositado dinero ante Cabrera e inmediatamente de conocerse el hecho, renunció a su cargo e incluso se desafilió de la ID para no manchar más al partido naranja y no empañar la imagen del Municipio.
El ex-Síndico de la Prefectura, Carlos Castro, opinó que aquí existe un matiz legal pues todos los ecuatorianos que hicieron este tipo de depósitos, actuaron mal y al margen de la ley y exige la renuncia del concejal.
Alberto Luna Tobar piensa que por moral lo están renunciando, él no ha renunciado, le han descalificado.... Agrega que: .:ellos (los depositantes) pueden tener una excusa, pero ésta no quita la culpabilidad porque decir me equivoqué o no me di cuenta de la gravedad del asunto... entonces tampoco han de darse cuenta de lo que es un régimen municipal, han de ir tan irresponsablemente a ejercer un cargo.
Juan Bustillos, ex presidente de la Federación de Barrios ha expresado que ...los cargos hay que desempeñarlos con dignidad y si se cometen errores hay que pagarlos con la renuncia... Lo mejor para la comunidad es que el concejal se excuse.. Haber participado en estos negocios implica obtener dinero fácil.
ILÓGICA absolución
El Tribunal Nacional de disciplina de la ID, contrariamente a la lógica debida, mas bien absolvió a Saquicela, desestimando la denuncia y manifestando que la sentencia es inapelable. La inaudita resolución provocó un verdadero galimatías entre los militantes socialdemócratas pues una grave división interna salió a flote y ha restado fortaleza a esta tienda política.
Si un Tribunal destinado a tranquilizar a los militantes del partido, poniendo la casa en orden y eliminando a los malos elementos, emite un dictamen que contraviene normas elementales de la ética ¿cuál será el resultado?. Por supuesto que no puede ser otro que la ruina del partido pues el fallo ahonda las divisiones existentes en su interior pues parece que un problema ético de envergadura no tiene importancia para un partido cuyos adalides dicen que combaten la corrupción, venga de donde venga.
Así entonces, las voces de rechazo a la decisión del Tribunal son también múltiples. El Comité Ejecutivo Provincial del partido ha pedido la reconsideración del fallo y se consideró burlado pues enérgicamente ha dicho que no se ha evaluado el daño político que Saquicela ha causado en nuestra provincia...
En el presente caso existe un rechazo unánime de la colectividad azuaya frente a la actuación del Dr. Saquicela, por lo que no podemos menos que dejar expresa constancia de nuestro absoluto desacuerdo con la resolución asumida cuyos efectos, de no reveérsela, son liquidacionistas y provocadores ante la opinión pública?. Además, se ha hecho público un pronunciamiento de la dirigencia pidiendo la renuncia de Saquicela y exigiendo que se reconsidere tamaño fallo.
ANTECEDENTES
Ya antes, Saquicela fue acusado de plagio de un Proyecto de Ordenanza para la regulación de horarios de los establecimientos que expenden bebidas alcohólicas que el Concejo Cantonal debía tratarlo a fines de enero y que en un 99 por ciento tiene semejanza con una Ordenanza similar de la capital de la República.
A más de ello, Saquicela logró -desde la concejalía- ubicar en diferentes puestos públicos municipales a su esposa, varios parientes y amigos. Asimismo, compañeros de su colegio secundario han manifestado que cuando cursaba el sexto año de bachillerato, antes de que terminara su período, fue derrocado como presidente del curso, acusado de malversación de fondos de unos dineros que reunían sus compañeros para la gira de fin de año.
También, cuando era estudiante de Derecho en la Universidad de Cuenca, ejerció la Vicepresidencia de la Asociación Escuela y durante el período de su gestión, jamás se rindió cuentas del destino de altas sumas de dinero entregadas a la dirigencia estudiantil para actividades de extensión universitaria.
Se conoce que en la concejalía y sobre todo en la presidencia ocasional del Concejo Cantonal, Saquicela ha usado la prepotencia para pasearse por todas las dependencias municipales, dando órdenes, fungiendo de suprema autoridad y manipulando siempre las cosas para llevar agua a su molino, sin importar los medios y los métodos, las traiciones y las fidelidades, en componendas y en un espectáculo que causa rechazo y antipatía y pone en claro una marcada despersonalización con evidentes síntomas de arribismo, oportunismo y ambición desmedidas.
LA CAÍDA del Zote
Lo curioso del caso es que, en concreto y no en abstracto, el concejal Saquicela, quien presume de sabio siendo notoriamente un zote, es abogado y -como tal- sabe perfectamente lo que es el delito de usura y no obstante, decidió depositar dinero en las cuentas del notario. No ha justificado los orígenes de dichos fondos. Este tipo de líderes son ciertamente los que rechaza la comunidad cuencana como para pretender que se acepte la misericordia mostrada ante Saquicela.
Publicado en la Revista El Observador
Año 2006, edición 32
LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN, NI SE COMPRA, NI SE VENDE, NI SE TRANSA.

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