jueves, 2 de febrero de 2023

 NI TRAMPAS NI MANIPULACIÓN DE LOS RESULTADOS


La CONSULTA POPULAR fue concebida como una

tabla de salvación para un gobierno débil y

desprestigiado, y terminó convertida en cortina de

humo para ocultarle al país los escándalos de

corrupción que salpican al propio presidente Lasso. En

efecto, al gobierno no le interesa resolver los problemas

de fondo que afectan al país; solo intenta dar un golpe

de efecto que la permita contener el acelerado deterioro

de su imagen pública. La ciudadanía está

absolutamente decepcionada con las desastrosas

políticas de su administración, de manera especial con

el intento de arremeter a sangre y fuego contra las

comunidades que se resisten al extractivismo minero y

petrolero.

La consulta popular es tramposa. Se aprovecha de la

angustia general frente a la inseguridad, y del

desencanto popular con instituciones como la

Asamblea Nacional, para motivar el voto afirmativo. A


Asamblea Nacional, para motivar el voto afirmativo. A

Lasso únicamente le interesan los resultados

electorales de la consulta, no las graves condiciones de

vida de la gente y ni siquiera alcanzar los objetivos que

motivan la consulta. Por eso, precisamente, ha rehuido

un debate público responsable, porque quiere poner

distancia con su creciente impopularidad. El gobierno

evita a toda costa que el pueblo identifique la consulta

con su deficiente gestión. Pero esos esfuerzos al final

resultan nulos: la ciudadanía, inteligente e intuitiva,

terminará votando NO en todas las preguntas, como

expresión de su rechazo a la inoperancia, ilegitimidad e

insensibilidad oficiales.

Hay que cuidar los votos en las urnas. En su

desesperación por conseguir aunque sea una ínfima

victoria, el régimen intentará manipular los resultados

finales. El NO a las ocho preguntas debe ir

acompañado por un NO a la eventual metida de mano

a la voluntad popular.


Quito, 1 de febrero de 2023

MONTECRISTI VIVE

No hay comentarios:

Publicar un comentario