Los oficiales rusos han dejado claro que su objetivo es eliminar todo vínculo de estos menores con Ucrania y sustituirlo por el amor a Rusia. Uno de los niños encontrados tenía solo 4 meses.
A menudo, las madres se llevan la peor parte. La ley rusa insiste en que solo la madre o el padre puede recuperar a un menor retenido en un campamento o en un hogar de acogida. Si los padres en edad legal para combatir están detenidos y, con toda probabilidad, torturados, la carga termina por recaer únicamente sobre las madres. Sin acción internacional, las posibilidades de estas mujeres son ínfimas.
Necesitamos una respuesta masiva e internacional para sacar urgentemente esta atrocidad a la luz. Usaremos esta atención como herramienta de presión para que Estados Unidos, el Reino Unido, la Unión Europea y otras potencias sancionen a los responsables, responsabilicen a cualquier persona implicada en estos horribles crímenes y ayuden a negociar el regreso seguro de los niños ucranianos.
Mientras lees estas líneas, se están cometiendo más secuestros, ¡así que cada minuto cuenta! Suma tu nombre para exigir medidas urgentes y después reenvía este mensaje a tus amigos y familiares. |
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