martes, 17 de abril de 2018

Mientras tanto en Catar...
A mediados de marzo, en medio de la creciente crisis de la frontera Norte, el ministro de Defensa del Ecuador, el jefe del Comando Conjunto de las FF.AA., y el comandante general de la Armada estuvieron de viaje por Catar, en el Golfo Pérsico, invitados por el Príncipe de ese país, a una Conferencia Internacional de Defensa Marítima.
16 de abril del 2018
POR: Juan Carlos Calderón
Director de Plan V, periodista de investigación, coautor del libro El Gran Hermano. 
Mientras la crisis de violencia crecía en la frontera norte, los jefes militares estaban en Catar"
Una corta nota del diario El Universo, del 15 de marzo del 2018, en plena crisis en la frontera norte, da cuenta de que el ministro de Defensa, Patricio Zambrano; el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas  y teniente general de la Fuerza Aérea César Merizalde Pavón y el comandante general de la Armada, contraalmirante Renán Ruiz Cornejo, asistían a la Exhibición y Conferencia Internacional de Defensa Marítima, DIMEX 2018, en Doha, Catar. Ahí, en la foto de la nota, se ve a los máximos jefes militares de la FAE y de la Armada, junto al ministro Zambrano, muy sonrientes junto a la señora embajadora del Ecuador en Catar, Ivonne Baki.
La invitación llegó al ministro de Defensa a mediados de febrero, por parte de su homólogo catarí, el señor Khalid bin Mohamed Al-Attiyah en la cual le decía que "me complace extender hacia usted un cordial saludo  y a su vez hago propicio extender la invitación para asistir a la VI Edición  de la Cumbre DIMEX 2018 —la Conferencia Internacional de Doha sobre la Defensa Marítima— la misma que se llevará a cabo durante el periodo del 12 al 14 de marzo  de 2018, en el Centro Nacional de Convenciones de Catar en Doha, bajo el patrocinio  de Su Alteza, el Jeque Tamim Bin Hamad al-Thani, Príncipe del Estado de Catar".  El señor ministro y los jefes militares aceptaron la invitación. Pocas semanas antes, el 26 de enero del 2018, la crisis de violencia en la frontera norte había estallado, literalmente, con el primer atentado con coche bomba en la historia del Ecuador, atentado que voló el cuartel policial de San Lorenzo, destruyó decenas de casas aledañadas y vehículos y causó 28 heridos.
Según la nota de El Universo, "Ecuador conoció que Catar busca vender algunas de sus naves marítimas y aéreas ya que tiene expectativas de reemplazarlos con nuevas y modernas adquisiciones. «Estamos interesados ​​en comprar los viejos buques destinados a ser reemplazados que están en buenas condiciones», dijo Zambrano en una conferencia de prensa en la que también estuvo presente la embajadora ecuatoriana Ivonne Baki.
"Zambrano dijo que podía darse cuenta de que Catar posee algunos de los equipos, aviones de combate y acorazados sumamente sofisticados «para proporcionar protección y seguridad a los mares de nuestro país, debido incidentes de actividades piratas». Según un alto funcionario de la Armada ecuatoriana, se dará preferencia a los buques cataríes comprados a empresas británicas, francesas e italianas".
El 16 de febrero, en el mismo sitio donde estalló el coche bomba, los soldados Jorge Franco y Virgilio Navarro recibieron disparos del lado colombiano en un enfrentamiento. Los militares estaban patrullando y fueron atacados por personal civil que protegía plantaciones de coca. El hecho ocurrió en la comunidad El Pan, que pertenece a la localidad de San Lorenzo.
Luego llega la invitación de Su Alteza, el Príncipe de Catar. Quien se negó a aceptar la invitación fue el comandante general del Ejército,  general Édison Narváez. En un oficio dirigido al ministro de Defensa, el 27 de febrero, le dice que no puede viajar porque tiene compromisos adquiridos con antelación.
Mientras el ministro de Defensa y los dos altos jefes militares permanecieron fuera del país, enterándose de las últimas novedades militares —o estaban ya de retorno del país del Golfo Pérsico (por lo menos 24 horas de viaje)— se dieron otros hechos en la frontera que delataban ya una creciente crisis de violencia en la frontera. En la madrugada del 16 de marzo se registró una explosión de un artefacto de fabricación casera en la cerca perimetral del retén naval de Borbón de la Armada del Ecuador, en el cantón Eloy Alfaro de la provincia de Esmeraldas.
Dos días más tarde, dos uniformados que eran parte de una patrulla militar que hacía controles de rutina en el sector de El Pan, también perteneciente a San Lorenzo, resultaron con heridas menores, en especial traumas acústicos por la detonación de lo que serían morteros artesanales.
Un patrullero policial que pertenece a la Unidad de Policía Comunitaria de la parroquia de Alto Tambo, del cantón San Lorenzo, en el km 48 de la vía Lita sufrió el impacto de lo que se presume fue la detonación de un artefacto explosivo. El hecho causó daños en la estructura y el parabrisas del vehículo, pero el uniformado que viajaba en su interior salió ileso del presunto atentado. Esto lo reportaba el propio diario El Universo.
El 20 de marzo ocurrió una de las mayores tragedias: tres infantes de Marina mueren al contado tras la explosión de un artefacto cerca a la población de Mataje. Once quedan heridos, tres de ellos de gravedad, uno de ellos con las dos piernas amputadas desde la ingle. Finalmente este último muere luego de una larga agonía. Fuentes navales consultadas no supieron precisar si el comandante de la Armada, el jefe máximo de los infantes de marina, se encontraba en el país en ese instante trágico.
En la conferencia de prensa en Doha, el ministro de Defensa ecuatoriano dijo que "Ecuador quiere ser el centro logístico de la Copa del Mundo 2022 en el continente americano, dada su ubicación estratégica en Sudamérica. Aseguraremos que haya una transferencia fluida de toda la logística del continente americano a Catar durante la Copa Mundial".

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