No, la hermosa melodía que lleva este título, no ha pasado,
no ha perdido vigencia, pues responde al eterno espíritu creativo del artista,
a la conjunción del sentimiento y la naturaleza, al abrazo permanente del
hombre y el paisaje. Tampoco pasa de actualidad, no puede pasar nunca la
orgullosa presencia del rey de los Andes, que corona nuestro escudo nacional,
aunque el ventarrón capitalista, que arrasa con todo, estuvo a punto de
extinguirlo, pero hoy tiende a conservarse gracias a la conciencia ecológica
que va ganando a la joven generación y a los niños del mundo.
Por desgracia, hay otro "cóndor´´ que tampoco pasa, y
que está muy vivo y al acecho de nuevas cacerías: el Plan Cóndor, inventado por
las dictaduras militares del continente en las décadas del 60 y el 70 del
pasado siglo, y que tuvo por comandante en jefe al matador del pueblo chileno,
Augusto Pinochet y figuras emblemáticas como el general Jorge Videla, que acaba
de ser recuperado por el infierno, mientras en Guatemala a Ríos Montt, fascista
de la misma camada, le espera una provechosa condena de 80 años de prisión.