El observador

 MISIÓN CUMPLIDA

Se fueron tras un sueño y lo cumplieron con sobra de méritos. El esfuerzo y sacrificio rindió buenos frutos. La experiencia ha sido motivadora, inolvidable, inigualable. El equipo de fútbol de AVICED Sub 16, viajó con destino a Montevideo para participar en el campeonato internacional Uruguay Cup.

Bajo la dirección técnica del profesor Pablo Arévalo, un extraordinario profesional, comprometido a fondo con la preparación del grupo de muchachos, todos adolescentes, con la compañía de varios padres de familia, que hicieron el esfuerzo económico para poder cubrir los gastos del viaje y estadía en la Atenas del Plata, durante diez días.

Jugaron, ganaron, empataron y también perdieron. En total cumplieron seis compromisos deportivos oficiales, acumularon 8 puntos, marcaron nueve goles, y recibieron seis. El balance es positivo. A cambio nos traen a la ciudad, el TROFEO DE BRONCE, más medalla en cada pecho de los deportistas noveles.

La alegría fue inmensa cuando los organizadores pidieron al equipo subir a la tarina para recibir la Condecoración. Juntos como un puño, cantaron el himno nacional y levantaron la bandera de nuestra querida patria Ecuador, ante la mirada de cientos de soñadores, que esperan y aspiran llegar lejos en el fútbol profesional.

Uno de esos soñadores es mi querido nieto Joaquín Cedillo Camacho, que cumple el rol de defensa central, ese es su puesto, pero cuando la situación requiere su contingente, hace de delantero y hasta de arquero, tal como sucedió en el encuentro frente al Arsenal, porque, según me informaron, el árbitro no le permitió tapar al guardameta titular (por algún problema), entonces tuvo que cuidar los tres palos todo el encuentro.

Ayudó desde su posición en cada partido, incluso marcó un gol en el primer partido disputado con el equipo de la escuela del mundialista Diego Forlán (DFC). Todos cumplieron a cabalidad, todos se merecen un sonoro reconocimiento por haber dejado el nombre de Cuenca, del Ecuador, en lo alto. AVICED un equipo que estuvo a la altura de los mejores, que se codearon y se fajaron de igual a igual, sin amilanarse. BIENVENIDOS A CASA, MISIÓN CUMPLIDA.

FIRMA: EL ABUELO ORGULLOSO