Hace mucho mucho tiempo, la vida en la Tierra estuvo a punto de desaparecer.
Durante la Gran Extinción, el rápido aumento de las temperaturas acabó con el 90% de los seres vivos. Fue la mayor extinción masiva de la historia.
Hoy, el planeta se está calentando todavía más deprisa y las especies se están extinguiendo a una velocidad mucho mayor. Los científicos han alertado de que a menos que cambiemos de rumbo, el colapso total de los ecosistemas es inevitable.
Tenemos que enterrar la era de los combustibles fósiles antes de que sea ella quien nos entierre.
Por eso, ¡este año hay que ponerse manos a la obra! Empezaremos por unirnos para detener el oleoducto más devastador del mundo, que atravesaría África Oriental y provocaría el desplazamiento de miles de familias, la destrucción de bosques protegidos y el bombeo de 1400 millones de barriles de petróleo que no nos podemos permitir quemar. Los próximos 2 meses son críticos.
Irrumpiremos en las juntas de accionistas, impulsaremos grandes protestas y lucharemos en los tribunales para impedir su construcción. Pero sabemos que no basta con librar esta batalla épica, así que también nos pondremos en pie por la Amazonía: exigiremos más medidas de protección y participaremos en un pleito histórico para obligar a los gobiernos a emprender acciones radicales contra el cambio climático. Ganar el caso podría suponer una revolución sin precedentes para nuestra lucha.
Nuestro empeño para evitar otra Gran Extinción es firme, pero te necesitamos a nuestro lado.
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