sábado, 7 de febrero de 2015

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La pieza que falta en el asesinato del general Gabela 

Por Emilio Palacio


Derly Salazar Vargas, sicario de alto vuelo. A comienzos del 2011 lo detuvieron por el asesinato del general Jorge Gabela. Después lo dejaron libre. Dos años más tarde, lo ametrallaron en plena calle. La Fiscalía borró su nombre de la investigación, pero el perito argentino que tuvo el caso a su cargo, asegura que es una de las piezas del rompecabezas que falta por investigar. 
LA NOCHE DEL 19 DE DICIEMBRE DEL 2012, UNA CAMIONETA COLOR BLANCO CON CUATRO PASAJEROS SE DETUVO en la manzana 263 de la ciudadela Sauces 6 de Guayaquil. Uno de sus ocupantes se bajó, apuntó con una ametralladora aDerly Salazar Vargas, de 24 años, que conversaba con dos amigos, y apretó el gatillo varias veces.
Además de Salazar Vargas, esa noche murieron también Julio Vernaza Gudero, de 20 años, y Jeremy Salazar Peña, de 22.
El asesino volvió a montar al vehículo y desapareció. 
La madre de Salazar Vargas acudió a la morgue a retirar su cadáver días después. Dijo entonces que no sabía quién pudo matarlo, pero sí recordó que alguna vez su hijo le pidió: “El día que me muera, mis mujeres tendrán que vestirse de rojo y traerme mariachis”.
Por lo visto, Salazar Vargas, alias “Francisco Cruz”, alias “Francis”, sabía muy bien que le esperaba un trágico final.
Sus antecedentes permitían suponerlo. Su crueldad era conocida. Dirigía una banda que utilizaba niños para asaltar. En una ocasión llamó a una de sus víctimas y le advirtió: “A tu mujer le voy a dar en la cabeza y haré todo lo que yo quiera con ella. Y también haré todo lo que yo quiera con tu familia, te voy a secuestrar y te cortaré dedo por dedo para que sufras”.
Una fuente de la Fiscalía del Guayas, que nos pidió que guardásemos su nombre en reserva, nos dijo: “Era un sicario de alto vuelo. Se comió a varios pesos pesados que andaban en drogas. No era un cualquiera”.
Cayó preso por primera vez en septiembre del 2007, a los 19 años. Lo detuvieron por el asesinato del subteniente de policía Iván Naranjo, al que intentó robarle tres mil dólares que acababa de retirar de un banco en el centro comercial Albán Borja de Guayaquil.
Sorprendentemente, lo liberaron enseguida.
El 14 de marzo del 2009 fue detenido por segunda ocasión, con un cómplice. Quiso robarle a un ciudadano que acababa de retirar dinero de una institución financiera en el sector de Lomas de Urdesa, sin darse cuenta de que los observaban desde una patrulla policial, que los persiguió y capturó.
Pero volvió a salir libre, tan pronto como la primera vez. 
Su tercera captura se produjo en febrero del 2011. Acababan de emitir una boleta en su contra por el asesinato de Ronald Guadamud (al que llamó para advertirle que le cortaría los dedos) y eso puso en alerta a los uniformados.
Una vez más, lo absolvieron.
Cayó preso por cuarta ocasión la noche del 14 de diciembre del 2011, cuando ingresó al restaurante El Rincón de Ingrid, en Sauces 5, al norte de Guayaquil. Un mes antes le había robado 40 dólares y las llaves de su carro al fiscal Errol Elizalde, que lo reconoció y llamó de inmediato a la policía.
En esta ocasión, encontraron en su celular varios mensajes de texto de este tenor: “Trabajo realizado”, “Trabajo por realizar”.
Pero una vez más salió libre. El juez que lo declaró inocente, renunció a la función judicial poco tiempo después.
Una fuente de la policía, que asimismo prefiere mantenerse en el anonimato, nos informó que en algún lugar debe estar registrada una quinta captura, pero no hay cómo verificarlo. La ficha de Salazar Vargas ha desaparecido de los registros de la policía nacional desde hace varias semanas, a raíz de que el escándalo del asesinato del general Jorge Gabela acaparase de nuevo la atención del público.
Habría un motivo para eso. El perito Roberto Meza Niella, de la empresa Consultora Pericial, que investigó la muerte de Gabela por encargo del régimen, escribió en su informe: “Derly David Salazar Vargas (alias Francis), sindicado como autor material del hecho, no es un personaje ajeno a esta historia [del asesinato del general Gabela], ya que estuvo detenido en el mes de febrero del 2011 por este caso y luego puesto en libertad, según constancia”.

Meza le dijo hace poco a la revista Plan V: “Las circunstancias de la liberación de Francis son muy sospechosas y recaen sobre el fiscal y ni hablar de las circunstancias de su muerte. Habría que preguntarle al fiscal el por qué de la liberación [de Salazar Vargas] a ver qué argumenta“. 

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