martes, 28 de septiembre de 2021

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EL OBSERVADORAQUÍ NO ECHAMOS FLORES. AQUÍ LANZAMOS DARDOS.
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Puede ser una imagen de carretera, árbol y texto
LA PLAZA DE LA VERGÜENZA
En la fotografía de la parte superior, podemos observar como era anteriormente lo que ahora denomino, "La Plaza de la Vergüenza" y en la parte inferior, una fotografía tomada el día de ayer, Domingo 26 de Septiembre del 2021.
En esta plaza debería existir una placa que diga: "Bajo esta gruesa capa de cemento, yacen los restos de lo que una vez fuera un área verde protectora de la orilla del río Yanuncay. Esta área verde fue sepultada bajo un manto de Ignorancia, Codicia y Prepotencia".
Es impresionante como, en nombre del progreso, vamos lentamente despedazando las áreas verdes de la ciudad. Cuando el Mundo entero trata de incrementar sus áreas verdes y reducir las áreas encementadas, para enfrentar los embates del cambio climático, nuestra alcaldía hace todo lo contrario: sepulta las áreas verdes bajo gruesas campas de cemento. La prepotencia y autoritarismo de la alcaldía, se ponen sobre la razón.
Las plazoletas que ahora abundan a las orillas del río Yanuncay, NO SON PARTE DEL PROYECTO ORIGINAL DE LA CICLOVÍA. Son obras adicionales que la alcaldía de Cuenca deslizó bajo el sobre a última hora y las construyó apuradamente bajo el lema de "es más fácil pedir perdón que pedir permiso". Las orillas de los ríos son áreas de protección muy especiales que forman parte de aquello que le da una personalidad única a Cuenca; no obstante esta ciudad se llama "Santa Ana de los Cuatro Ríos de Cuenca".
Las "Plazoletas de la Vergüenza" deberían contener placas que listen los nombres de los personeros municipales y constructores que han destruido este patrimonio natural de la ciudad, para que sus nombres no sean olvidados y se sepa sobre quienes cae la vergüenza de haber destruido estas importantes zonas verdes.

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