Francisco Febres Cordero
De actuar con prepotencia calificó un funcionario del
Gobierno a un canal de televisión por haber protestado ante la imposición de
transmitir un programa producido en un medio gubernamental. De prepotente
calificará mañana ese mismo funcionario a un diario independiente si protesta
porque se lo obliga a llenar su página editorial con artículos de uno de los
periódicos oficiales. Y de prepotente, si una radio no transmite una entrevista
realizada a alguien cuya voz es grata para el Gobierno.