Por Fernando García Durán
- El Municipio manifiesta que el tranvía deberá impactar positivamente en las calles más importantes, que contienen bienes patrimoniales inmuebles de valor A1, semi-peatonizando o peatonizando las mismas. Y coloca el tranvía sobre la arteria que debería ser mejorada y conservada, la calle Gran Colombia.
- Existe un sistema integrado de transporte
de menos valor y totalmente autosostenible que dejaría en el Centro Histórico
entre 120 a 150 buses por supuesto totalmente híbridos, con unas 12 zonas de
transferencia que serían alimentadas por los 350 buses ya existentes en la
actualidad. Esto costaría aproximadamente 70 millones de dólares. Y fue una de
las alternativas que siempre estuvo considerada.
- Si en este momento los buses (480)
transportan 420 mil personas por día y el tranvía va a llevar 130 mil por día
¿Por qué solo merman 75 buses del Centro Histórico? Haciendo una fácil ecuación deberían mermar
por lo menos 150 buses y no 75 como está en el proyecto. Lo que nos pone frente
a una realidad aún más perversa. Para bajar las 350 unidades de buses
necesitaríamos de 5 tranvías y una inversión de al menos 1250 millones de
dólares. Lo que se sabe es que por lo menos se hará un tranvía más o un trole.
¡Urra! Ya tendríamos todos los sistemas de transporte que colapsaron el
tránsito en Quito.
- El tranvía altera el patrimonio cultural de
los bienes inmuebles en sus primeros pisos. Hay una afectación visual. También
afecta el adoquín que constituye igualmente patrimonio de la ciudad, ya que se
requiere de rieles.
- Cambio laboral: En la actual Gran Colombia
existen más de una docena de hoteles, almacenes de venta de línea blanca, joyerías; en sus calles transversales,
algunos parqueos. Indudablemente todo esto tendrá que cambiar y se podrá
solamente ejercer negocios de cosas que se puedan cargar en fundas pequeñas. Lo
cual afectará la rentabilidad de los locales y el valor comercial de sus
espacios. La inseguridad es algo que vendrá ya que es un transporte masivo de
personas. Esto afectará también a los negocios que se establezcan en general.
- Cambio social: Al movilizar 130 mil
personas hasta las 12 de la noche indudablemente tendremos problemas
delincuenciales, prostitución y venta de drogas. Así se haga un tranvía de oro
con brillantes. Ya que se construirán 20 zonas de transferencia o intercambio.
No es nuevo que en ningún lugar del mundo en dónde existen terminales de
transporte sean estos trenes, tranvías, buses o aeropuertos ocurra este tipo de
actos que van en contra de toda la ciudad.
- Fiscalización unilateral: El gobierno
francés dice que nos presta el dinero a 0 intereses y con 5 años de gracia. Yo
digo, como ciudadano, que preferiría una fiscalización bilateral, pagar los
intereses correctos y que sepamos los cuencanos cuánto va a costarnos el
tranvía realmente. O que también nos digan que no le conviene un tranvía a
Cuenca.
- El tranvía nace como una idea maravillosa
de parte del arquitecto Juan Izquierdo. Por supuesto, una idea política que le
daría la ganancia al actual alcalde. La poca gente que quedó en el centro de la
ciudad dijo: si viene un tranvía, por fin se van los buses del centro. Los
chóferes dijeron: ¿qué van a hacer el tranvía? Y si lo hacen, nosotros no
salimos. Como ya mencioné el tranvía merma solo 75 buses en el Centro
Histórico. Es decir que mermar un bus nos cuesta aproximadamente 3.5 millones
de dólares. Cuando salió la idea de tranvía, en la época de campaña hacia la
alcaldía de Cuenca, costaba 75 millones. Luego vinieron los vascos, los
españoles, los chinos y fue aumentando el precio. Al final llegaron los
franceses y el tranvía nos cuesta 250 millones.
- No es un transporte autosustentable para el
sistema integrado de transporte que tiene un costo único de 0.25 centavos. Hay
tranvías que con el costo de más de 1 euro han cerrado en el exterior,
principalmente en Europa. Consúltese en
Internet en algunas ciudades de España por ejemplo “Parma”.
- Un
tranvía no sirve para una ciudad como Cuenca que tiene 400 000 habitantes.
- El tranvía está integrado al proyecto
minero a gran escala que terminará con el Austro, con la provincia del Azuay y
la ciudad de Cuenca. No podemos olvidarnos que en un lapsus de subestimación a
los cuencanos el Presidente manifestó que si queríamos el tranvía, tendríamos
que ir a la minería a gran escala.
- Existe una serie de cosas mucho más
importantes que se deberían hacer en Cuenca. Por ejemplo: un aeropuerto
internacional, un nuevo parque industrial más alejado de la ciudad. Y si es que
existe una ciudad con derecho a volver a tener el tren es Cuenca. En la ruta
Cuenca - Ingapirca. Lo cual nos desarrollaría cultural y turísticamente.
- La falta de decisión política para retirar
las líneas de buses de la calle Sangurima.
Si quieren hacer un tranvía y el proyecto está decididamente anudado, no
seamos estúpidos y no destruyamos una de nuestras principales arterias
patrimoniales.
- Se deja al margen de esta decisión al
Instituto de Patrimonio Cultural y varias instancias ciudadanas como
universidades y técnicos que si los hay.
- Si se hace un segundo tranvía para la parte
sur este y oeste nos costaría, sumando los dos, más que el aeropuerto de
Tababela en Quito.
-
Falta de socialización total con la ciudadanía y su institucionalidad a
través de talleres, explicaciones claras y concisas sobre los diferentes
estudios de impacto que debía contener este proyecto. No solo el marketing que
se ha realizado a escala desproporcionada.
- No
se considera los bienes inmuebles patrimoniales de la Gran Colombia que son
cientos y de primer valor. Entre los más importantes: Casa de las Posadas, La
Iglesia de Santo Domingo, El Colegio de la Inmaculada, El Colegio Hermano
Miguel, etc., etc., etc.
- Una propuesta política ,señor alcalde y
querido arquitecto Juan Izquierdo, no resuelve un asunto de carácter técnico.
-El apoyo de las cámaras de Comercio e
Industrias a este proyecto es inaudito ya que nunca han consultado con sus
bases ni se han acercado a ellas en ningún momento. Existe además una
experiencia negativa en algunas ordenanzas que apoyara la Cámara de Comercio
como, la ordenanza que no hacía otra cosa que defender desorganizadamente el
comercio informal, teniendo a plena conciencia y conocimiento que el objetivo
neural de esta cámara era defender al comercio formal. Tengamos siempre
presente que las Cámaras de la Producción tienen que contener entre sus
directores y funcionarios a los mejores hombres de la ciudad y no debe existir
ningún tipo de vínculo, deben transparentar de manera absoluta y lúcida las
decisiones del gobierno local dando luces que guíen verdaderamente hacia un
mejor destino a nuestra ciudad.
- La experiencia de Cuenca en proyectos de
transportación pública ha sido totalmente negativa, ya que se han realizado
proyectos perversos como el de las ecovías y el cierre de la avenida 12 de abril,
proyectos que dejaron de manera permanente a los buses en el Centro Histórico,
causando muerte, deterioro en la salud y destrucción de nuestro patrimonio
cultural.
- El voto en contra de concejales como Jaime
Moreno, posiblemente el concejal más lúcido del actual cabildo y el voto de
Tarquino Orellana es una alerta en rojo que no estamos considerando. No importa
la cantidad de concejales que hayan votado a favor sino, la calidad de los que
votaron en contra.
- Si el sistema integrado de transporte
público hace referencia a un cobro unificado entre el bus y el tranvía. El
valor actual es 0.25 centavos. Deberíamos pensar si los señores transportistas
estarían dispuestos a tomar de esta cantidad doce centavos y medio, es decir el
50%. O es que el costo del tranvía para su sostenibilidad será una carga
adicional para toda la ciudadanía afectando gravemente la economía de los
cuencanos. Señores concejales, ¿recibieron ustedes los estudios financieros
completos del proyecto?
- A pesar de que la ciudad de Cuenca y el
Austro han sido sectores de explotación minera históricamente en pequeña
escala, también existen una serie de acontecimientos que dan cuenta de una
serie más de potencialidades. A mediados del siglo XIX la producción de la
cascarilla, hasta la primera mitad del siglo XX la paja toquilla y el sombrero
como su elemento artesanal más emblemático. La creación de ERCO en los años 60.
En la actualidad la declaratoria de patrimonio universal. Lo cual nos pone como
potencia cultural y turística del Ecuador y del mundo. Esta potencialidad
durará por siempre y su apropiación significa cero impacto ambiental. No
necesitamos ni el tranvía, ni la minería a gran escala en Cuenca ni en el
Austro.
- No podemos seguir equivocándonos en
endeudamientos innecesarios. Tenemos que manejar nuestros recursos con mucho
tacto. La sabiduría nos dice “No se ven sus luces ni se oye el sonido, pero el
tren de la crisis que ya golpeó a Europa y a Norteamérica viene.” Cada vez es
más difícil vivir en el Ecuador.
- La ciudadanía se encuentra espabilada,
incapaz de comprender el sincretismo existente entre el campo y la ciudad. Nos
necesitamos mutuamente, y los ideales del mundo en general se concentran en la
actualidad en la defensa de la tierra y el agua. Este desentendimiento de lo
que ocurre en nuestra ciudad de manera permanente no es casual, sino ha sido
causada entre otras cosas por la falta de políticas culturales que no se han
visto desarrolladas desde hace más de 20 años.
El Municipio de Cuenca no tiene un solo museo en funcionamiento. El
museo “Remigio Crespo Toral” cerró hace más de 15 años y aún no ha sido
reabierto. El museo de Arte Moderno tiene realizada su curaduría, ya que
contiene todas las obras premiadas en las diferentes bienales, y nunca ha sido
instalado de manera permanente. El mega proyecto del Barranco jamás fue
ejecutado. La calle Santa Ana sigue cerrada. Si el proyecto San Francisco
tuviera que hacerse fuera de este mundo, los que ahora lo usan quisieran ir
acompañándolo al más allá y no habría quien los detenga.
- Ya no
podemos seguir aguantando más golpes arteros a nuestra ciudad. Dignidad,
libertad y conciencia. Si no reaccionamos ahora, este paraíso del cual nos
enorgullecemos y del que gozamos se acabará y terminará por desaparecer.
- La mayor vergüenza del actual Concejo
Cantonal, cuyo peso deberán cargar por siempre los que apoyaron esta atrocidad,
consiste en recibir los estudios de factibilidad de parte del señor Alcalde el
día 28 de diciembre. ¿Cómo puede ser que un proyecto tan importante y de un
costo tan elevado se lo apruebe en el lapso de un día y una noche y bajo el
concepto de que el ejecutivo daba como plazo máximo hasta el día lunes 31 de
diciembre para entregar aproximadamente 150 millones de parte del Estado a este
proyecto.
- Esta aprobación fue realizada entre gallos
de medianoche. Este proyecto debe haberse discutido por lo menos durante
algunos meses o por lo menos un año por parte del Concejo. Los gallos de
medianoche no cantan el 28 de diciembre señores concejales, sino el 24.
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